Esta mañana, rocas de grandes proporciones se desprendieron del cerro Cotomono, lo que interrumpió el tránsito de ingreso al valle del Monzón, en Tingo María. El hecho ocurrió aproximadamente a las 7 de la mañana y causó alarma en trasportistas y pasajeros. Afortunadamente, no hubo víctimas que lamentar.
Cuarenta familias que viven junto a la carretera Tingo María-Monzón, en el sector Jacintillo, deberán ser reubicadas debido a que se encuentran en una zona de alto riesgo. En el lugar ya se han producido deslizamientos de tierras. Así lo informó el gerente municipal, Ricardo Guerrero.
Al menos cinco familias deberán ser reubicadas para que se pueda continuar con la ejecución del asfaltado de la carretera Tingo María – Cueva de las Lechuzas, informó Marco Falcón, administrador del Consorcio Florida, entidad que ejecuta la obra.
Las restricciones que se producen debido a los trabajos previos de ingeniería, de la obra de asfaltado de la carretera Tingo María-Cueva de las Lechuzas, han originado algunas molestias entre transportistas y pasajeros que se desplazan desde esta ciudad hacia el valle del Monzón, debido a que tienen que esperar una hora para poder transitar a su destino.