Madre de Dios en la visión de un ganador del Premio Nóbel a la ecología
El Madre de Dios del cual hoy se habla, el de las dragas ilegales destruidas, el de los daños al ecosistema por la minería informal, el de los muertos a causa de la violencia contra el decreto supremo 012, no es el Madre de Dios que imagina Julio Cusurichi Palacios, subgerente de participación vecinal y comunidades nativas del gobierno regional. Su Madre de Dios es un mundo sin excluidos, con respeto al medio ambiente, con respeto a la identidad cultural y a los derechos humanos.