Se inició la ejecución del financiamiento para ejecutar la Fase II Actualizada de la Declaración Conjunta de Intención (DCI) para reducir las Emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) por deforestación y degradación de bosques (REDD+). Este había sido suscrito por el Perú con los gobiernos de Noruega, Alemania, Reino Unido y Usaid (como observador).
Para ello se cuenta con USD 10 millones, a fin de fomentar el desarrollo sostenible en las zonas de intervención, principalmente en nuestra Amazonía. Previamente, se concretó la aprobación de un conjunto de acciones de planificación y levantamiento de información.
El programa de arranque fue aprobado en primera sesión ordinaria de la Junta de Administración presidida por el Ministerio de Ambiente (Minam). Incluye la conformación del equipo técnico hasta la ejecución de acciones priorizadas del Plan de Implementación de la Fase 2 de la DCI Actualizada 2021-2025. Su ejecución tomará tres años.
Cabe citar que la reunión se efectuó con la participación de los ministerios del Ambiente, de Cultura y de Economía y Finanzas. También acudieron representantes de la Embajada de Noruega en el Perú, de los gobiernos regionales amazónicos, de Serfor y de los pueblos indígenas.
El equipo inicial se encargará de levantar información en territorio y desarrollar los documentos de gestión a largo plazo. Para ello, se articulará con gobiernos regionales y organizaciones indígenas. Con ellos se identificarán actividades prioritarias a nivel local, en el marco de la titulación de territorios.
Trabajo conjunto
Al respecto, la viceministra de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales del Minam, Nancy Chauca, destacó la importancia de iniciar este trabajo. «Es crucial tomar medidas rápidas para contar con las herramientas necesarias e impulsar la implementación de este proceso», dijo en su condición de presidenta de la Junta de Implementación.
En tanto, Omar Corilloclla, director de Monitoreo y Evaluación de Profonanpe, explicó que el Plan de Arranque tiene una duración de cinco meses. En ese lapso se elaborarán documentos de gestión y culminará con la aprobación del Plan Operativo Global y un Plan Operativo Anual. Estos servirán para definir la ruta de acción.
A su turno, el director ejecutivo de Serfor, Luis Gonzáles-Zúñiga, dijo que el objetivo de la DCI es combatir la deforestación y degradación de los bosques. “Para lograrlo, es necesario establecer prioridades fundamentales que permitan asignar los recursos que serán implementados a través de los gobiernos regionales, organizaciones indígenas y organizaciones sociales», acotó.
Además, intervinieron Tabea Casique, secretaria del Consejo Directivo de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep); y Oseas Barbarán, presidente de la Confederación de Nacionalidades Amazónicas del Perú (Conap). Ellos detallaron las necesidades de las comunidades indígenas en el desarrollo y participación de este tipo de iniciativas.
Sobre la Declaración Conjunta de Intención
- En el 2014, el Perú firmó un acuerdo de cooperación con Noruega y Alemania, denominado Declaración Conjunta de Intención (DCI). Este fue ampliado en 2021 con la inclusión del Reino Unido y Usaid; esta última en calidad de observador.
- El acuerdo busca mitigar las emisiones de GEI en nuestro país, que se producen por la deforestación y degradación de los bosques amazónicos.
- En la COP 27 se firmó el Acuerdo de contribución entre Perú, Noruega y Profonanpe para la gestión USD 10 millones para el financiamiento del “Plan de Implementación de la Fase 2 de la DCI Actualizado 2021-2025”. Este tiene un costo aproximado de USD 50 millones.