Con el objetivo de cubrir el registro total de víctimas de la violencia política de los años 80’ y 90’, el Gobierno Regional de Ayacucho en coordinación con la municipalidad de Ayna – San Francisco en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, viene impulsando durante este mes, el empadronamiento de las víctimas de la zona.
En conversación con Diálogo Ciudadano, programa informativo de INFOREGION que se emite para todo el VRAE, Iván Joanes Leyva, responsable del Gobierno Regional de Ayacucho para el registro único de víctimas, informó que durante todo este mes se realizará el registro de víctimas que aun no hayan sido inscritos en padrones anteriores.
“Se está haciendo este último registro con el propósito de cubrir el total de víctimas registradas en esta zona del VRAE, ya que esta herramienta es vital para dar inicio a las reparaciones individuales en las zonas afectadas durante la época de la violencia”, indicó.
Inscripción en tres grupos
En ese sentido, expresó que el proceso de inscripción se realizará en tres grupos, el primero abarcará desde la comunidad de Monterrico hasta Calicanto; el segundo, desde Las Palmas, Carmen Pampa, Pasñato, Naranjal y Los Ángeles y el tercero desde Sol Naciente hasta el centro poblado de Rosario.
En el ámbito de la región Ayacucho, el programa de Registro Único de Víctimas se viene implementando en siete provincias. Dentro de las comunidades beneficiadas en la provincia de La Mar se encuentran los distritos de Ayna, Santa Rosa, San Miguel, Anco, Chungui, Luis Carranza y Chilcas en el VRAE.
Joanes Leyva precisó que “el proyecto es iniciativa de los afectados de la violencia política durante los años 80’ al 2000, el mismo que fue entregado al Gobierno Regional de Ayacucho en convenio con el Registro Único de Reparaciones Colectivas”.
“Vamos a hacer un diagnóstico situacional para realizar un contraste de lo ya registrado a fin de evitar duplicidad en la relación de empadronados. Lo que se quiere es beneficiar al cien por ciento de las víctimas de la violencia política en el VRAE”, expresó.
En otro momento, el responsable para el registro de victimas en esta zona del VRAE, manifestó que para ser empadronados como víctimas de la violencia, se debe acreditar el fallecimiento de un familiar directo, o desapariciones forzadas, víctimas de torturas, violaciones sexuales, así como hijos producto de abuso sexual, desplazados, indocumentados, entre otros.
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