Fanny Cornejo vive en Amazonas, pero nació en Lima. Es bióloga por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y actualmente es directora de la Asociación Civil Yunkawasi. Su amor y pasión por la conservación de la naturaleza la llevó a fundar esta cooperativa hace 14 años. Esta se encarga de trabajar conjuntamente con las comunidades amazónicas y andinas para, entre otras acciones, impulsar la protección de las especies primates del Perú, como el mono choro de cola amarilla, el mono nocturno andino, los monos aulladores y el mono machín de Tumbes.
Gracias a su esfuerzo y a una larga trayectoria profesional es que ha llegado a ser la primera peruana finalista del certamen Conservacionista Emergente 2022, el cual otorga el prestigioso Premio Indianápolis, el cual reconoce a los conservacionistas menores de 40 años que trabajan para tener un impacto significativo en salvar especies animales de la extinción.
“Para mí ha sido muy emocionante [ser finalista]. Cuando en agosto me dieron a conocer la noticia fue súper emocionante. Pero de verdad yo soy la cara visible, pero tenemos un gran equipo, en su mayoría mujeres, que forman parte de la Asociación Yunkawasi”, afirma Cornejo.
En la Asociación Yunkawasi se busca inspirar y educar a la población indígena y andina con el fin de fortalecer las capacidades de los tomadores de decisiones, y realizar estudios científicos de especies poco conocidas o estudiadas. Entre los trabajos de mayor relevancia se encuentran la conservación del mono choro cola amarilla. Es así como la felicidad que siente Fanny por su esfuerzo no le impide comentar la necesidad de implementar más acciones sobre este mamífero endémico más grande del Perú, el cual solo se encuentra en las zonas tropicales de nuestro país.
“El mono choro de cola amarilla debería ser lo que el oso panda es para China. Esta especie ha perdido el 80% de su territorio ubicado en los bosques andinos. Debería tener más visibilidad”, advierte nuestra entrevistada.
Esta primate come frutas, flores, hojas e insectos y anda en grupos de entre cinco y 18 individuos. Vive en bosques con árboles grandes y altos, que puedan aguantar su peso. Habita principalmente en el territorio de Amazonas y San Martín, pero también, como ha comentado Fanny, se encuentran en Junín y posiblemente en departamentos como Ayacucho y Pasco.
Sin embargo, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), el mono choro de cola amarilla está en peligro de extinción. Por esta razón, varios organismos del sector público como el Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) entre otros, además de gobiernos regionales y la Asociación Civil Yunkawasi, vienen implementando el Plan de Acción Regional de Conservación del mono choro de cola amarilla y el mono nocturno andino, que fue aprobado mediante una Ordenanza Regional el 15 de marzo de 2020, el mismo día del inicio de la cuarentena a nivel nacional por la pandemia del Covid-19.
«El mono choro de cola amarilla debería ser lo que el oso panda es para China»
«[Aunque] no contamos mucho recursos humanos y tampoco financieros, pero con el Plan de Acción Regional tenemos una iniciativa con las comunidades campesinas para hacer investigación participativa. Ellos reciben capacitaciones para ir a sus territorios e identificar qué tipo de mono existen», detalla Cornejo.
Otra especie de primate que también se encuentra en peligro es el mono machín. Este animal silvestre enfrenta la caza y el tráfico de fauna silvestre como principales amenazas. Esto ha dado como resultado la fragmentación de los bosques generada por la pérdida de su hábitat.
Actualmente, el mono machín no está dentro de las medidas a ejecutar en el Plan Nacional, pues según ella explica «esta especie no figuraba en el imaginario de nadie hasta que en los últimos años se unió a la lista de los 25 primates más amenazados del mundo. Eso hizo que el gobierno le ponga atención». Por ello, la finalista del Premio Indianápolis resalta la importancia de que aquellas autoridades que ocupen los gobiernos regionales el próximo año se involucren de la misma forma en la que se viene haciendo hasta la fecha