Desde hace cuatro días, los pobladores del distrito de Ayna San Francisco no cuentan con agua para el consumo, debido a que las tuberías de captación y conducción de este recurso habrían colapsado por el deslizamiento de las tierras, generado por las intensas lluvias que caen en esta zona del valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE).
Frente a este problema, la población ha mostrado su indignación por la inacción de las autoridades municipales que no han hecho mayor esfuerzo para solucionar el problema.
“Realmente es indignante lo que estamos atravesando. Hace cuatro días que no tenemos agua y nadie nos ha dado ninguna explicación. No podemos hacer nuestras actividades sin ese recurso tan indispensable”, indicó Virgilio Vargas, poblador de San Francisco.
Por su parte el empresario Adrián Aréstegui señaló que la falta de agua perjudica a todos los pobladores, en particular a los pequeños microempresarios.
“Ya no puedo seguir alquilando cuartos del hotel porque no puedo ofrecerles un servicio incompleto, sobre todo tratándose del agua. Éste es un problema de nunca acabar. Las autoridades no pueden ser tan insensibles”, expresó.
Mientras tanto, Jorge Huamán Peceros, primer regidor de la muncipalidad de San Francisco, precisó que el problema se originó por el deslizamiento de tierras en varios sectores, producto de las intensas lluvias que caen por la zona y aseguró que un grupo de trabajadores partió hacia el lugar esta madrugada con la finalidad de restablecer el servicio.
Cabe recordar que la propia comuna de San Francisco emitió la ordenanza municipal 010-2009, en la que señala que el agua entubada, no tratada, no reúne las condiciones para ofrecer un servicio adecuado a la población.
La Dirección Regional de Salud de Ayacucho, al realizar un exhaustivo monitoreo de la calidad de agua para consumo humano en San Francisco, realizó una serie de observaciones que incide en la mala calidad del agua.
El presidente del Comité Proagua del distrito Ayna San Francisco, José Villanueva, insistió en la urgencia de mejorar el sistema de agua entubada que provee de este insumo vital a toda la población.
“Esta situación dramática del agua genera una serie de problemas en la salud de la población. No es casualidad que la mayor incidencia de enfermedades esté relacionada con la parasitosis, las diarreas y los problemas en la piel, en especial de los niños”, manifestó.