Walter Albán, ex Defensor del Pueblo, saludó la marcha realizada en 165 ciudades del mundo contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, y señaló que evidencia “el rechazo a toda forma violenta, absurda o cruel de pretender establecer ideas propias a costa de la vida de otras personas”.
Agregó que la opinión pública reaccionó impactada por el uso de secuestros de personas inocentes y por la situación en que viven los colombianos, y pidió mantener la idea de que eso es inaceptable y que resulta denigrante para cualquier tipo de propuesta o de definición política.
Similar situación en Perú
Frente a las evidencias de una vinculación entre las FARC y el narcotráfico, advirtió que algo similar podría estar ocurriendo en una división menor en el Perú, en donde, dijo, se presentan propuestas de orden político que tienden a desnaturalizarse y deslegitimarse al utilizar métodos violentos y de terror para conseguir sus fines.
Albán dijo que “se conoce la vinculación de estos grupos con el narcotráfico, con acuerdos que son contrarios al interés de la sociedad, y en donde se utiliza la vida de seres humanos para negociar los intereses inmediatos de estas organizaciones”.
Remarcó que por esa circunstancia, el país está enfrentando un problema muy serio, por lo que recomendó al Gobierno tener estrategias diferenciadas para entender el origen en cada caso, los métodos que utilizan, las actividades que hacen en cada zona y de acuerdo a eso establecer una estrategia frontal.
Dejadez política
Albán precisó que esta vinculación entre grupos armados y el narcotráfico, que no se vivía en décadas pasadas en el país, ahora ha aparecido y acrecentado debido a que los sucesivos gobiernos no le prestaron la debida atención.
“Los distintos gobiernos no han tenido una preocupación especializada en el tema del narcotráfico y lo que viene ocurriendo en el Alto Huallaga” dijo al tiempo de señalar que no se tomó en cuenta el grado de complejidad que este problema tiene en el país.
Por ello urgió en focalizar la atención de este grave problema para evitar caer en la misma situación que vive actualmente el hermano país de Colombia.