El uso continuo y desmedido del alcohol puro o en gel, que no presenta la concentración recomendada para la desinfección de las manos, puede provocar problemas en la piel. Así lo advirtió Víctor Cabrera, médico integral de Sisol Salud. Explicó que la piel tiene una descamación natural; sin embargo, el uso constante de estos productos, utilizados para protegerse del COVID-19, está produciendo dermatitis.
“Mucha gente está usando de manera excesiva el alcohol en los diversos puntos donde se desplaza, con la finalidad de protegerse del COVID-19, ya sea en el carro, la oficina; incluso luego de lavarse y bañarse se aplican el alcohol, lo cual es desproporcionado”, enfatizó. Asimismo, advirtió de posibles casos de quemaduras por el uso del alcohol o de la combinación de otros productos inflamables que se usan para la desinfección personal o del hogar.
“El alcohol es un material inflamable y si una persona usa algún desinfectante a base de este producto, debe asegurarse de tener las manos secas al momento de hacer algún tipo de flama, ya sea en la cocina o al momento de prender un cigarro; de lo contrario, podría sufrir quemaduras”, dijo.
Agua y jabón
Para evitar este tipo de accidentes el médico recomendó que, al desinfectarse las manos, se usen de preferencia agua y jabón, por ser este último un producto que no irrita la piel. Agregó que las personas que presentan una ligera sensación de descamación o molestias pueden usar una crema rehidratante durante dos o tres días; si esta les da buenos resultados, deben continuar con el tratamiento.
Si continúan las molestias y los dolores, deben acudir al especialista para recibir tratamiento médico. Recordó, finalmente, que cuentan con dermatólogos altamente calificados que atenderán sus consultas en los distintos establecimientos, informó Sisol Salud a INFOREGIÓN.