Unión Europea incrementó cooperación antidrogas en Perú

La presidenta de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), Carmen Masías, destacó hoy la participación de la Unión Europea (UE) en la lucha antidrogas en Perú, lo que se demuestra, dijo, en el aumento de su aporte en el presupuesto para este fin.

“La Unión Europea ha pasado de 22 millones de euros a 42 millones de euros. Por ejemplo, Satipo es una zona que está con la influencia de la Unión Europea y los proyectos (de desarrollo alternativo) con los socios peruanos”, indicó en Radio Nacional.

Como se recuerda, el Perú destinará 300 millones de dólares para la lucha contra las drogas, de los cuales 85 millones provienen de los Estados Unidos, con una meta de erradicación de 30,000 hectáreas de hoja de coca ilegal.

Además, la financiación del Programa de Apoyo a la Estrategia Nacional de Lucha contra las Drogas 2012-2016 cuenta con el aporte de 42 millones de euros.

De este total, son 32.2 millones los comprometidos para un periodo de cuatro años y medio, y 10 millones más para el Programa Desarrollo Alternativo Satipo (DAS).

Masías explicó que la estrategia peruana es clara y cuenta con tres componentes: el control de la oferta (erradicación y control de insumos), el desarrollo alternativo con inclusión, así como la prevención y rehabilitación.

“La estrategia se enmarca en una política nacional. Cuando el presidente Ollanta Humala y su equipo luchan contra la minería ilegal, contra el terrorismo, todo esto ayuda a tener un mejor país y que esta estrategia sea efectiva”, señaló la funcionaria.

En ese sentido, refirió que, cuando se captura a mandos senderistas en lugares como el valle del Monzón (Huánuco), se puede ingresar para aplicar las estrategias y evitar la resiembra de cultivos ilegales.

Al respecto, explicó que el porcentaje de resiembra pasó del 90 a 40 por ciento, disminución que, sostuvo, se espera que continúe gracias a mayores recursos asignados.

La titular de Devida añadió que, a diferencia de lo que ocurre en Colombia, en el Perú no se fumigan los cultivos ilícitos de hoja de coca, sino que se extraen de raíz, con la finalidad de que no vuelvan a brotar y evitar dañar el medioambiente (Andina).