Un duro golpe contra el narcotráfico dio la Policía en el sector de Huascatay, distrito de Pacobamba, en Andahuaylas, al incautar más de 143 kilos de pasta básica de cocaína y detener a cinco sospechosos, entre ellos el dueño de la mercancía ilegal, así como a dos vehículos que eran utilizados para trasladar la droga.
La acción de interdicción se realizó el fin de semana pasado en el marco de la operación denominada «Cordillera Blanca – Oreja de Perro».
La incautación, que se considera el más duro golpe contra el narcotráfico organizado que opera entre el VRAE y Andahuaylas, estuvo al mando del jefe de la División Policial de Andahuaylas, coronel PNP Blas Cornejo Castilla.
Según pudo conocer INFOREGION, acciones de inteligencia permitieron tomar conocimiento de que un importante cargamento del mencionado alcaloide pasaría por Andahuaylas procedente de la localidad de Lechemayo, en Ayacucho, en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE.
La mercancía ilegal está valorizada en aproximadamente un millón y medio de soles y tenía como destino la ciudad de Lima, según las pesquisas policiales.
Balacera intentó evitar incautación
Los efectivos policiales intervinieron primero a una camioneta que hacía las veces de «liebre», que iba conducida por Juan Rufino Pillaca Lloclla (29), natural de Uripa, quien registraba antecedentes por tráfico ilícito, TID.
Inmediatamente después, los agentes se movilizaron para interceptar el segundo vehículo, donde se presumía transportaban la droga, pero poco antes de llegar al sector conocido como Picchu Alto, fueron recibidos con balas disparadas por desconocidos que se hallaban ocultos entre los matorrales.
Los policías reaccionaron inmediatamente respondiendo el ataque que, con disparos de revólveres y fusiles de asalto, recibían. Al final del enfrentamiento, la pericia de las fuerzas del orden logró reducir a los delincuentes.
En total fueron siete los sospechosos que atacaron a la patrulla policial; sin embargo, durante la refriega cuatro pudieron huir del lugar. Los capturados fueron identificados como Atilio Iván Quispe Rojas (29), Moisés Huamán Barrientos (25) y Raúl Pillaca Lloclla (30), este último resultó herido de bala, por lo que fue trasladado al hospital de Andahuaylas.
Intentaron ocultar la droga
Antes del enfrentamiento y con el propósito de burlar a los agentes, los narcotraficantes decidieron ocultar la droga enterrándola dentro de bolsas de polietileno en un paraje del sector de Tacmara, aproximadamente a 10 kilómetros de distancia de la intervención.
Con la finalidad de encontrar los estupefacientes, la policía «peinó» la zona y ubicó enterradas cuatro bolsas de polietileno con un total de 130 «ladrillos» de pasta básica de cocaína, con un peso exacto de 143.041 kilogramos.
Posteriormente y tras conocerse detalles de la operación, un equipo de agentes se movilizó hasta Ayacucho para ubicar y detener al propietario de la mercancía, el mismo que fue identificado como Eraclio Vivanco Ramos (41), natural de Kimbiri, Cusco.
Tanto este sujeto como los otros cuatro compinches permanecerán detenidos en la policía por 15 días, mientras duren las investigaciones.
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