Con la aprobación del Reglamento Interno Sectorial sobre organismos vivos modificados (OVM), en la práctica, el Gobierno autorizó el ingreso al Perú de transgénicos agropecuarios y forestales.
Los riesgos de tal determinación son de lo más diversos: se afecta de forma irreversible la biodiversidad, se impacta en la economía, en el modo de vida de miles de personas (principalmente pequeños agricultores), y se alterna algo tan cotidiano como la alimentación.
Y es que a partir de modificaciones genéticas hechas en un laboratorio se puede lograr que una vaca dé más leche, o que una papa sea más resistente al frío, o que un maíz sea resistente a las plagas.
Aun que hasta el momento no se han confirmado daños para la salud como resultado del consumo de productos transgénicos, sí está demostrada la contaminación genética, es decir que un cultivo transgénico contamina a un cultivo no transgénico.
Para ver la segunda parte del video haga click aquí