Trabajos mancomunados y políticas claras reducen los cultivos ilegales

El representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) para el Perú y Ecuador, Flavio Mirella, precisó que para continuar con la desaceleración del crecimiento de las hectáreas de hoja de coca en el Perú, es necesario implementar políticas claras y trabajar de forma directa con la población.

A pesar de que los cultivos de coca en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE), La Convención y Lares experimentan ascensos notorios, el representante de la UNODC explicó que las cifras aun están dentro de un crecimiento moderado. Por eso, recomendó fortalecer los trabajos mancomunados y los programas de desarrollo alternativo.

En conversación con INFOREGIÓN, Flavio Mirella reiteró que la labor de las Naciones Unidas seguirá vigente a pesar de los problemas internacionales. “Nuestra tarea es proveer de información al Estado sobre la medición de las áreas cocaleras. Esta herramienta contribuye con su toma de decisiones” indicó.

Mejorar las deficiencias

En ese sentido precisó que el próximo gobierno debe evaluar el trabajo que se ha venido realizando, continuar con las estrategias que han favorecido el desarrollo de las poblaciones y mejorar las deficiencias. “Nosotros seguiremos apoyando al Gobierno para que el narcotráfico no influya de forma negativa el crecimiento económico que viene experimentando el Perú”.

Al finalizar la presentación del informe «Monitoreo de Cultivos de Hoja de Coca 2010«, el representante de la UNODC recomendó al nuevo gobierno incrementar el presupuesto a la lucha contra el narcotráfico, reforzar el régimen de control de insumos químicos y el lavado de activos y promover las acciones de desarrollo pacífico.

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