A menos de 48 horas de un primer ataque que dejara un policía muerto y otro herido, este mediodía se produjo otro ataque senderista al campamento de los erradicadores de coca ilegal en el sector Guacamayo, distrito de Pólvora, provincia de Tocache, en San Martín, que cobró la vida de un trabajador del Proyecto Especial CORAH, que trabaja en las labores de erradicación de cultivos ilegales de coca en el Alto Huallaga.
Producto del ataque resultó gravemente herido con dos impactos de bala en el hígado y el pulmón, el trabajador del Corah Benito García Vizarreta quien fue trasladado de inmediato por vía aérea al Hospital de Tingo María. Lamentablemente murió minutos después de llegar.
El artero ataque se produce 48 horas después de un primer atentado al campamento de los erradicadores y que costara la vida al suboficial de tercera Cano Espinoza Rojas de 20 años de edad, y dejara herido al suboficial de tercera Luis Alberto Castillo Díaz de 25 años con un balazo en la pierna derecha.
Pese a las medidas de seguridad que adoptaron las fuerzas del orden tras el primer ataque senderista al Puesto de Comando de Operaciones, del CORAH en la localidad de Guacamayo, la columna armada volvió a atacar este puesto, matando esta vez al trabajador Benito García Vizarreta de 45 años y natural de la región Ica.
Orden de matar
No hay información oficial sobre los autores del crimen. Algunas versiones de la zona precisan que el ataque habría sido dirigido por «Sergio» el último mando operativo que le queda a «Artemio» en el Huallaga, en tanto que otras fuentes especulan que sería “Roberto” un enviado por el líder senderista del VRAE «José» con la orden expresa de impedir las labores de erradicación de cultivos ilegales en la zona de Tocache donde se ha detectado mucha resiembra de cocales.
De acuerdo a la información que pudo obtener INFOREGION, las labores de erradicaciónde coca ilegal se iniciaron a las nueve de la mañana en la zona del Porvenir de Mishollo, distrito La Pólvora, provincia de Tocache, región San Martín, contando con la protección de patrullas de la policía antidrogas.
Cerca de las 10:50 de la mañana, comenzó un inesperado hostigamiento armado contra el campamento del CORAH en Guacamayo, que fue repelido de inmediato por los efectivos policiales.
Muerto en pleno servicio
Benito García Vizarreta se encontraba en campo efectuando sus labores cotidianas cuando fue alcanzado por dos disparos que se introdujeron por la zona costillar sin orificio de salida y le perforaron el hígado y el pulmón, quedando gravemente herido.
Tras adoptarse las medidas de seguridad para el descenso de los helicópteros, dado que el viernes las aeronaves también fueron atacadas por los elementos en tierra de Sendero Luminoso, el trabajador herido fue finalmente evacuado y trasladado al hospital e EsSalud en Tingo María, en situación crítica.
Sin embargo, cuando era preparado para ingresar a sala de operaciones, no resistió más y falleció.
García Vizarreta se suma a la lista de trabajadores del CORAH que fallecieron en servicio para reducir los cultivos ilegales de coca que alimentan al narcotráfico y que genera violencia y atraso en las cuencas que aún se resisten a dejar la economía ilegal.
El cadáver del infortunado trabajador del CORAH sería trasladado en las próximas horas a su ciudad natal, estándose a la espera de la llegada de sus familiares.
Mientras tanto, se supo que el jefe del Frente Policial Huallaga, general PNP Marlon Savitzky Mendoza, ordenó que las fuerzas operativas de las fuerzas del orden que se encuentran en la zona, redoblen las tareas de persecución y captura de la columna terrorista que en menos de dos días ha causado ya dos lamentables muertes.
Esta reacción senderista en defensa de los cultivos ilegales de coca que beneficia a los intereses del narcotráfico que opera en la zona, se produce luego que se iniciara desde el miercoles pasado, la erradicación de cultivos de coca ilegal en la zona de Guacamayo y Mishollo en Tocache.
Graficando la estrecha vinculación que existe entre la producción de coca ilegal en la zona y el narcotráfico, la policía antidrogas que resguarda y acompaña las labores de erradicación desactivó ya cuatro mega laboratorios de drogas instalados y camauflados entre los cultivos ilegales.
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