Debido a las varias observaciones que tiene, el camal municipal de Tingo María podría ser clausurado, generándose así un grave problema a la ciudadanía, informó Franco Azañedo, representante del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (SENASA).
Azañedo reveló que las observaciones datan de hace un buen tiempo y hasta la fecha la Municipalidad no ha cumplido con levantarlas, instando a las autoridades a dedicarse a este asunto.
Entre las observaciones mencionó la mala ubicación de las instalaciones, toda vez que se encuentra dentro del casco urbano así como también las recomendaciones para el enmallado de tal modo que se pueda evitar, por ejemplo, la presencia de gallinazos.
Dijo que en esta misma situación se encuentran los camales de Ripán, La Unión, y Ambo, los que también podría ser cerrados y sancionados.
De otro lado, aseguró que la carne de porcino que se comercializa en Tingo María se encuentra debidamente certificada y se garantiza su buen estado, por lo que pidió confianza a la población.
Señaló que esta carne es inspeccionada como corresponde por los profesionales que trabajan en el camal y otros que certifican su calidad.