En los últimos 40 años se han deforestado dos millones y medio de hectáreas de bosques vírgenes de nuestra amazonía, la tercera parte de todo el territorio peruano, para sembrar hoja de coca destinada al narcotráfico.
José Isla, especialista en medio ambiente de DEVIDA, sostiene que el cultivo de la hoja de Coca se realiza en condiciones de bosque virgen, por lo cual hay que talar totalmente el bosque y habilitarlo para la agricultura de la coca.
“Se ha detectado que para cultivar una hectárea de coca se tienen que derribar tres hectáreas de bosque virgen, con la finalidad de reservar posteriormente los sucesivos cultivos de coca y también para fines alimentarios”, puntualizó Isla.
Asimismo, señaló que, progresivamente, una vez que la coca aprovecha todos los recursos de la fertilidad natural del bosque y los agota, tiende a desplazarse a nuevas tierras de bosque virgen que son derribadas y deforestadas nuevamente.
“De esta manera, durante las últimas cuatro décadas se han deforestado 2 millones y medio de hectáreas de bosques de nuestra amazonía y el daño es considerable, porque los bosques capturan el carbono de la atmósfera y la oxigenan, y esto agrava el tema del cambio climático, el efecto invernadero del cambio climático con todas la consecuencias que sabemos que nos van a traer en adelante”, agregó.
Finalmente, Isla señaló que este sistema progresivo de deforestación, llevaría a generar tierras estériles y a la configuración de un desierto en plena selva.