Ambientalistas e integrantes de la Comisión Agraria y Ambiental del valle de los ríos Apurímac y Ene, COAAM-VRAE, denunciaron que taladores ilegales vienen arrasando impunemente los bosques de las cabeceras de las cuencas en el distrito de San Francisco, poniendo en grave riesgo los ojos de agua y el abastecimiento del agua para el consumo de miles de pobladores.
Por este motivo se realizó una reunión multisectorial en el distrito cuzqueño de Pichari, para evaluar los daños y reforzar el trabajo de los comité de gestión de bosques en las comunidades de Awaruchallucc y Guindamito.
Los pobladores denunciaron la inoperancia y complicidad de las autoridades.
“No se puede permitir que se siga arrasando con los árboles de esas dos comunidades ubicadas en las cabeceras de las cuencas del distrito de San Francisco y así lo han entendido los propios pobladores de esas zonas, que se han comprometido a vigilar y proteger sus bosques”, sostuvo el presidente del COAAM-VRAE, Edgar Gómez Límaco.
El funcionario sin embargo, lamentó que el responsable de la Dirección Forestal y de Fauna Silvestre, con sede en el VRAE, Juan Verano, lejos de apoyar esta iniciativa se haya mostrado en contra de respaldar al referido comité de gestión de bosques.
“La misma población de Awaruchallucc y Guindamito ha denunciado que esas zonas de reserva forestal están siendo arrasadas por madereros informales con el visto bueno del responsable de la Dirección Forestal y de Fauna Silvestre”, apuntó Adrían Arestegui, promotor ambiental en el VRAE.
Penas no menores de cuatro años
Arestegui, a través del programa Diálogo Ciudadano de INFOREGIÓN que se transmite desde San Francisco hacia todo el VRAE, recordó que las leyes forestales establecen penas privativas no menores de cuatro años para todos aquellos funcionarios que autorizan y permiten la comercialización, adquisición y trasporte de flora y fauna.
Por su parte el funcionario del ex Instituto Nacional de Recursos Naturales, INRENA, Juan Verano, sostuvo respondió que los taladores cuentan con licencia otorgada por las mismas autoridades comunales, pero aclaró que solo es para usos de autoconsumo; mas no para fines comerciales.
Sin embargo, los mismos pobladores de la zona y los integrantes del COAAM VRAE, calificaron como falsa esa versión y aseguraron que a diario salen vehículos cargados de madera que son comercializados en diferentes mercados.
Ante los reclamos y la presión de las autoridades y ciudadanos, mediante llamadas telefónicas, para no permitir que se siga devastando los bosques, el funcionario de la Dirección Forestal y de Fauna Silvestre, aseguró que en adelante se vigilará que no se corte un árbol más en la zona.