Además de depredar los recursos naturales y el medio ambiente, la minería ilegal en el Perú mueve más de 2,900 millones de dólares al año, convirtiéndose en una actividad criminal que genera mayores ganancias que el narcotráfico, denunció hoy el alto comisionado para la interdicción minera, Daniel Urresti.
La Policía Nacional destruyó varias maquinarias pesadas y campamentos donde vivían mineros ilegales en la zona de Pampa Blanca, en la cuenca del río Ramis, en Puno, luego de una interdicción contra la minería ilegal que contamina el medio ambiente. El operativo fue dirigido por el Alto Comisionado de Asuntos de Formalización de la Minería de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), Daniel Urresti.
El Presidente del Consejo de Ministros, Oscar Valdés Dancuart, junto a cinco ministros de Estado viajan hoy al departamento de Puno, para verificar in situ la contaminación en la cuenca del río Ramis producida por la minería informal y la minería ilegal.
Luego de llegar a acuerdos con el Ejecutivo, los mineros informales de Puno decidieron levantar el paro que acataban, con el fin de continuar con el diálogo y acogerse al proceso de formalización dentro del marco legal vigente que impulsa el gobierno.