La comunidad de Hermilio Valdizán ha dejado de ser considerado como uno de los distritos con alarmantes niveles de pobreza y desnutrición, y gracias al trabajo y esfuerzo de sus habitantes y el apoyo de instituciones como el Programa de Desarrollo Alternativo, se ha transformado en la capital del café de exportación.
La vasta amazonia peruana alberga a comunidades como Puente Piedra en la provincia de Leoncio Prado, Huánuco, donde su gente construye cada día el futuro, dedicándose por completo al cultivo del Café.
El programa de televisión Purito Desarrollo: todos a ganar congrega a diversas comunidades del Alto Huallaga, quienes participan del concurso “Selva Ganadora” con la ilusión de ganar el primer puesto y poner en ejecución el mejor proyecto de desarrollo para su comunidad.
Los agricultores de la comunidad de José Carlos Mariátegui en el Alto Huallaga sonríen satisfechos porque sus vidas han sido transformadas gracias al cacao, y ahora están preparados para afrontar los retos del futuro y acceder a una mejor calidad de vida.
El inconfundible aroma, cuerpo y sabor del exquisito café peruano que se obtiene de la comunidad Río Azul, entre las regiones Huánuco y Ucayali, ha transformado una zona de violencia en esta comunidad con grandes expectativas de desarrollo y progreso.
La comunidad de trampolín está ubicada a 19 km de la ciudad de Tingo María, y gracias al apoyo del Programa de Desarrollo Alternativoal tiene ahora una carretera de acceso en buenas condiciones para sacar su producción agropecuaria a los mercados de la zona.
El centro poblado menor de Pendencia Baja, ubicado a 21 kilómetros de la ciudad de Tingo María, en el distrito de Daniel Alomía Robles, cuenta con aproximadamente 150 familias, cuyo 40% está conformada por niños, y que alcanzaron la unidad y el progreso cuando dejaron de lado los cultivos ilícitos y se dedicaron a sembrar productos legales.
A 21 kilómetros de Tingo María se encuentra el caserío de Pendencia Alta, una comunidad modelo del distrito de Daniel Alomia Robles – Pumahuasi, y que con apenas 164 habitantes, es ya muy conocido por su gran producción de cacao y además por sus buenas prácticas en defensa de su medio ambiente.
Así como muchas comunidades de la zona, el poblado de Huayhuantillo, conformado por 440 habitantes, en su mayoría jóvenes y niños, ha comenzado a sentir los beneficios del progreso y desarrollo luego que decidiera años atrás dejar los cultivos de coca ilegal y apostar por cultivos lícitos con el apoyo del Programa de Desarrollo Alternativo, PDA.
Los pobladores de la comunidad de Antonio Mansilla están logrando su desarrollo en base al esfuerzo, pero sobre todo, a los cultivos de cacao que han incrementado obteniendo grandes ganancias.