Para tener éxito, el denominado Plan VRAEM, lanzado recientemente por el Gobierno para combatir el narcotráfico y el terrorismo en el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM) debería fortalecer la relación con las organizaciones sociales de base.
El paro cocalero que se viene realizando en la zona de Aguaytia, sin ninguna duda esta teniendo un “efecto boomerang”, porque la población con mucha madurez esta revelándose y cuestionando a los dirigentes cocaleros que con gran facilidad recurren a estas medidas de fuerza, señaló el especialista en temas narcotráfico Rubén Vargas.
La huelga cocalera que se reinició el pasado viernes en Padre Abad convocada por sus dirigentes exigiendo el cese de la erradicación de los cultivos de coca ilegal que llevan adelante los trabajadores del Proyecto Especial Corah, se debilita cada día que pasa por el abandono que sufren de parte de sus propias bases y por el rechazo de la población y productores lícitos.
La producción del café y del cacao, son los cultivos bandera del valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) y los pobladores se sienten orgullosos de ello, aseguró la congresista por Ayacucho, Elizabeth León.
El coordinador de los gobernadores del valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, Edgar Ricra, informó que le entregó personalmente al Presidente de la República, Alan García Perez, una carta demandando que se aceleren los proyectos de impacto en la zona, como la electrificación de las comunidades rurales, creación de una universidad autónoma y el inicio del asfaltado de la carretera Quinua-San Francisco.