Con el Instituto Nacional de Investigación Agraria (INIA) como aliado estratégico, el Gobierno Regional de San Martín desarrolla un importante proyecto en la Estación Experimental El Porvenir para industrializar el piñón blanco y así convertirlo en biocombustible.
El posible conflicto entre la producción de alimentos y la generación de combustibles renovables –argumento utilizado para atacar las investigaciones sobre biocombustibles con el biodiesel– fue negado categóricamente durante la mesa redonda “Bioenergía–Biocombustibles como alternativa viable para combustibles fósiles”, realizada recientemente en Brasil.
Los cultivos energéticos se presentan como una posibilidad de generar abundante mano de obra, en especial el cultivo de caña de azúcar bajo riego y el piñón blanco, con una calidad de empleo que garantiza que el productor se sustraiga de la pobreza.
Un nuevo módulo de cosecha y poscosecha del piñón blanco fue instalado en el distrito de Chazuta, provincia de San Martín, con la finalidad de mejorar la competitividad de los productores en el manejo de este cultivo y consolidar la cadena productiva en todos los niveles.
El Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) se ha constituido en el principal artífice en el desarrollo del paquete tecnológico del cultivo del piñón blanco en San Martín. Este organismo investiga y valida los ecotipos de piñón, y garantiza la calidad del producto.
En los últimos dos años la región San Martín logró incrementar a 600 hectáreas las áreas de cultivo de piñón blanco, y alcanzó una productividad de 0.75 toneladas por hectárea así como un rendimiento de aceite de 86 galones ó 325.5 litros por tonelada, según informó la Dirección Regional Agraria (DRA) de esa región.
El piñón blanco muestra importantes avances en la región San Martín y se constituye en una excelente alternativa para la producción de biocombustibles. A la fecha la inversión privada en el cultivo de este fruto supera los dos millones de soles y hay cerca de 600 hectáreas sembradas