Ni coca ni muerte

El valle del Monzón en Huánuco ha sido durante décadas una “zona liberada”. Allí no podía ingresar la policía, la presencia del Estado era simplemente inexistente y tanto el terrorismo como el narcotráfico hacían y deshacían a su antojo. Regía la ley del más fuerte, del terror o de la mafia. La posibilidad de aplicar planes de erradicación de los cocales existía solo en la imaginación de los estrategas del gobierno.

50 colaboradores de ‘Artemio’ en el Huallaga están prófugos

El presidente de la Federación de Cocaleros Agropecuarios de José Crespo y Castillo, Jorge Soto Vásquez, y el dirigente de la Federación de Organizaciones de Productores y Agricultores Forestales del Alto Huallaga, Teodosio Aquino Durand, son dos de las 50 personas que se encuentran con orden de captura judicial por su participación en actividades narcoterroristas. A ese grupo de requisitoriados pertenecía el recientemente capturado líder cocalero del valle del Monzón, Eduardo Ticerán Salazar.