Varios medios de comunicación acaban de presentar en sus portadas al conocido dirigente cocalero Eduardo Ticerán como “narcoterrorista”. ¿Lo es? No lo sé. Pero lo que sí sé es que ninguno de dichos medios ha cumplido con dar cuenta de los mínimos elementos probatorios.
El presidente boliviano, Evo Morales negó, a finales de agosto, un pedido de asilo político formulado por el entonces prófugo dirigente cocalero del valle del Monzón y presidente de la Central Nacional Cocalera del Perú, (Cenacop), Eduardo Ticerán Salazar, para burlar el cerco policial por el pedido de la justicia peruana por cargos de narcotráfico y terrorismo.
En opinión del especialista en temas de narcotráfico, Rubén Vargas la relación entre el Gobierno y el sector cocalero entra en una fase de distanciamiento tras la reciente captura del dirigente de la Central Nacional de Cocaleros del Perú (CENACOP), Eduardo Ticerán, quien tenía una orden de captura por presuntos delitos de narcotráfico y terrorismo.
Las investigaciones policiales sobre el accionar y la conducta del detenido dirigente cocalero del valle del Monzón, Eduardo Ticerán Salazar, lo sindican como pieza muy importante en el apoyo que Sendero Luminoso cuenta para su actividad en el Monzón y en el valle del Alto Huallaga.
Como un fuerte golpe para los productores cocaleros agrupados en la Central Nacional Agropecuaria Cocalera del Perú (Cenacop) consideró el economista Dennis Pereyra la captura del dirigente Eduardo Ticerán Salazar, ocurrida esta mañana en el centro poblado de Cachicoto, en el distrito huanuqueño de Monzón.
Una de las consecuencias inmediatas de la captura del dirigente cocalero Eduardo Ticerán, sobre quien pesa acusaciones de narcotráfico y terrorismo, puede ser el rompimiento de la alianza que existe entre las organizaciones cocaleras del Alto Huallaga y el Gobierno.
Luego de constantes acciones de inteligencia, dado que se había convertido en un escurridizo personaje que aprovechaba la ausencia de instituciones del orden del Estado en el valle del Monzón, el dirigente cocalero Eduardo Ticerán Salazar, requerido por la justicia debido a las acusaciones que penden sobre él y que lo señalan como cercano al líder senderista del Huallaga, Florindo Flores Hala (c) “Artemio”, fue finalmente capturado por las fuerzas del orden, cuando dormía en un inmueble del centro poblado de Cachicoto, en el distrito de Monzón.
Citando la versión de varios colaboradores eficaces, el jefe del Frente Policial Huallaga, general Whitman Ríos Adrianzén reveló que el recientemente capturado dirigente cocalero del Alto Huallaga Eduardo Ticerán Salazar recibía órdenes directas del cabecilla terrorista “Camarada Artemio” para el cobro de cupos.
El dirigente cocalero Eduardo Ticerán, presidente de la central Nacional Cocalera del Perú en la zona de Monzón, fue capturado por efectivos del Frente Huallaga de la Policía Nacional del Perú en el distrito de Cachicoto, en Huánuco.
Uno de los dirigentes cocaleros líderes en el valle del Monzón, en Huánuco, Eduardo Ticerán, respaldó el nombramiento de Ricardo Soberón como nuevo jefe de Devida y además aseguró que el abogado es su amigo personal.