Autoridades municipales de Mazuko, en el distrito de Inambari, región Madre de Dios, empezaron a llevar ayuda para atender a las 16 familias que resultaron afectadas por los desbordes en las quebradas de Chaupimayo y Paucar, que también generaron serios daños a las viviendas.
Cerca de tres mil personas fueron afectadas por las intensas precipitaciones pluviales que ocasionaron el desborde de los ríos Huallaga y Supte, inundando viviendas y afectando vías de comunicación en las localidades de Supte San Jorge, distrito de Rupa Rupa, y Naranjillo, distrito de Luyando (provincia de Leoncio Prado, Huánuco).
El último fin de semana la población de Madre de Dios sufrió la inundación de los ríos Tahuamanu y Muyumanu que afectaron parcelas agrícolas y áreas pastoriles de la localidad de Mavila.
Mientras que la carretera central, en el tramo entre Tingo María y Huánuco, continúa con serios problemas de circulación, la vía Federico Basadre, que une a la capital de Leoncio Prado con Pucallpa, ha comenzado a deteriorarse en varios tramos afectando el tránsito, además de dañar, colateralmente a algunas viviendas ubicadas en sus cercanías.
Las ciudades de la selva de las regiones Huánuco, San Martín y Ucayali quedaron aisladas e incomunicadas por vía terrestre luego que las aguas del río Huallaga destrozaran y se llevaran más de 150 metros de plataforma asfáltica a inmediaciones de los kilómetros 472 y 482 de la carretera central, en el tramo que une Huánuco con Tingo María.
El capitán de fragata, Jesús Menacho Piérola, jefe de Capitanía de Puerto de Madre de Dios, informó que el nivel de las aguas del río Madre de Dios sobrepasó el 1.64 metros, lo que lo puso fuera de su normal estado.
Las lluvias siguen azotando las diferentes zonas de nuestro país. En Tingo María, el desborde del río Huallaga afectó a más de cien familias y dejó otras cincuenta y ocho damnificadas.
El puerto del Centro Poblado Ccatun Rumi, ubicado en Pichari, en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE), fue declarado inhabitable debido a los huaycos y el desborde de los ríos. Los 600 habitantes del distrito cusqueño iniciaron la evacuación de la zona ante el temor de ser golpeados nuevamente por los desastres naturales.
Las caudalosas aguas del río Apurímac se tragaron literalmente a una persona y ocasionaron la inundación de numerosas viviendas de los distritos de San Francisco y de Kimbiri, ubicados uno frente a otro en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE y sólo separados por el caudaloso río que sigue aumentando peligrosamente su caudal.
La institución educativa Nº 38039 de Chacco, del distrito de Quinua, sufrió daños de consideración a consecuencia de las lluvias torrenciales que también afectaron a numerosas familias, parcelas agrícolas y viviendas. El director de la UGEL Huamanga, Richard Guardia Yupanqui, inspeccionó el lugar para reportar las pérdidas.