La Municipalidad Distrital de Pichari, en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE, ha puesto en marcha exitosamente el Proyecto Integral de Seguridad Ciudadana, a través del cual se ha logrado desarticular varias bandas de asaltantes que en los últimos años habían desatado el temor en la población.
A 30 años de prisión podrían ser condenados los dos delincuentes que asaltaron a mano armada una tienda de venta de motocicletas en Aucayacu durante la semana pasada, sostuvo el Fiscal Provincial Mixto de Aucayacu, Ricardo Nicanor Agüero Coral, quien recordó que los sujetos dejaron gravemente heridos a la pareja de esposos que son propietarios del mencionado local comercial.
Dos delincuentes que asaltaron a mano armada a los dueños de una tienda que vende motocicletas lineales y mototaxis fueron capturados por agentes policiales de la comisaría de Aucayacu. Los sujetos golpearon a la pareja de esposos y les produjeron varias heridas en la cabeza. El local comercial está ubicado en la intersección del jirón Tingo María y Aucayacu, en el distrito de José Crespo y Castillo.
Tras abrir un forado en la parte lateral de una zapatería, dos delincuentes lograron ingresar al local comercial y se robaron toda la mercadería que pudieron para luego huir rápidamente del lugar. Minutos después y tras una espectacular persecución, agentes de la Policía Nacional capturaron a los desalmados sujetos.
El analista político Carlos Basombrío señaló que la captura de la banda de ‘pishtacos’ que asesina a pobladores para vender su grasa en el extranjero habría sido un psicosocial que tuvo como objetivo distraer la atención del público frente a una investigación periodística que denuncia ejecuciones extrajudiciales de delincuentes en Trujillo.
Tras un paciente trabajo de seguimiento, integrantes de los comités de autodefensa y del serenazgo municipal del distrito de Pichari, pusieron al descubierto un fumadero en el que se encontraron a dos sujetos ebrios y con síntomas de haber ingerido otras sustancias tóxicas.
A través de llamadas telefónicas, inescrupulosos sujetos que se hacen pasar por policías extorsionan a inocentes pobladores, haciéndoles creer que un familiar ha sido detenido por transportar droga o haber cometido algún otro delito. Estos delincuentes piden cuantiosas recompensas a cambio de lograr la liberación de los presuntos infractores. Varios pobladores de esta zona del valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) han denunciado estos intentos de extorsión.