Cultivos ilegales de coca generan daños irreparables en el medio ambiente del VRAE
Los impactos en el medio ambiente generados por los cultivos de coca ilegal en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE) son catastróficos, debido a que para cultivar una hectárea de esa planta se tienen que deforestar tres hectáreas de bosque. Además para obtener cuatro o cinco cosechas al año, la cantidad de herbicidas, fertilizantes, insecticidas y fungicidas se multiplica también por cuatro o cinco, lo cual deja como resultado irreversibles daños a la salud de las personas y la ecología.