«Hoy en el Perú se lavan en activos entre 6,500 y 7,000 millones de dólares al año»
La procuradora Antidrogas Sonia Medina Calvo es una mujer admirada y temida. Tiene diez años persiguiendo a narcotraficantes y tratando de hacer justicia con las pocas armas que la ley le da. Su cliente tampoco es fácil. Es el propio Estado, el que a veces no le da todas las facilidades que requiere. Preocupada por los duros golpes que está recibiendo en la Fiscalía y el Poder Judicial nos recibe en una extraña oficina de lo que fuera una suite matrimonial en un hotel en Lince incautado a un narcotraficante. La llegada a su piso tiene algo de tensión. El ascensor no tiene luz y no parece que vaya a tenerla en mucho tiempo. Encerrada en esa caja oscura pienso que su trabajo se parece mucho a ese breve trayecto.