El presidente de Devida Romulo Pizarro aseguró que la lucha antidrogas en el Valle del Río Apurímac y Ene (VRAE), que involucra a Junín, Ayacucho y Cuzco, funcionará sólo si se trabaja atacando de manera paralela los problemas prioritarios de las comunidades aledañas con las acciones de interdicción.
Pizarro recordó que el Vrae es una zona de alta producción de coca, y por ello la estrategia de su institución es trabajar en tema en forma multisectorial, no solo para el tema cocalero, sino para sacar de la pobreza a las zonas colindantes a los centros de producción de cocaína.
El funcionario detalló que la idea es un Plan de Desarrollo Integral y para ello se requiere una permanente coordinación entre el ejecutivo y los gobiernos regionales y municipales.