Sólo entre el 18 y 45% de los ecosistemas de los bosques tropicales subsistirá en el 2100

Según un estudio dirigido por el Instituto Carnegie de los Estados Unidos, para el 2100 sólo entre el 18 y el 45% de las plantas y animales de los ecosistemas de bosques tropicales permanecerán tal cual los conocemos en la actualidad.

“Se trata de la primera recopilación global de la proyección de impactos en los ecosistemas de los bosques tropicales afectados por la deforestación, la tala y el cambio climático”, afirma Greg Asner, investigador en el Instituto Carnegie y autor principal de este estudio que combina por primera vez nuevos datos de deforestación y tala selectiva con 16 proyecciones de cambio climático para los bosques tropicales de todo el mundo, que comprenden más de la mitad de todas las especies de plantas y animales que viven en el planeta.

Asner precisó que las autoridades y los que gestionan las tierras deberían enfocar sus esfuerzos a reducir la deforestación para ayudar a las especies de las areas para las que se prevé un mayor sufrimiento, a adaptarse al cambio climático.

Biodiversidad de bosques tropicales alterada

Indicó que al combinar las imágenes por satélites, los mapas de tala y deforestación y los modelos climáticos, los científicos obtuvieron escenarios de cómo las especies se reorganizarán para 2100.

Así, para Centroamérica y Sudamérica, el cambio climático podría alterar cerca de dos tercios de la biodiversidad de los bosques tropicales.

Según los expertos, se podrán apreciar cambios en la biodiversidad en el 80% de la región, incluida la cuenca amazónica.

En el área del Congo (África), el cambio climático y la tala de bosques afectarán entre el 35 y el 74% de la zona. A escala continental, cerca del 70% de la biodiversidad de los bosques tropicales africanos se verán afectados.

Asimismo en Asia y en las islas del centro y sur del Pacífico, la deforestación y la tala son las causas del cambio. El cambio climático desempeñará un papel inferior que en los casos de África o Sudamérica.

El estudio, publicado en Conservation Letters, demuestra que entre el 60 y el 77% de esta área es susceptible a la pérdida de biodiversidad debido a los cambios del uso del suelo de la región.

Luchar contra los cambios

“Este estudio es la mayor evidencia de que los ecosistemas naturales del mundo sufrirán profundos cambios –incluyendo alteraciones severas en la composición de las especies- a través de la influencia combinada del cambio climático y el uso del suelo”, señala Daniel Nepstad, coautor del trabajo e investigador en el Centro de Investigación Woods Hole.

“La conservación de la biodiversidad mundial, tal y como la conocemos, dependerá del declive rápido y considerable de las emisiones de gases de efecto invernadero”, advierte el investigador.