La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) denunció al gobierno de Venezuela que utiliza dos instancias oficiales, Conatel y la Corporación Maneiro, para presionar a televisoras y diarios independientes de Venezuela.
Tanto la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) como la estatal papelera Corporación Maneiro, son señaladas como los instrumentos más fuertes de coacción de parte del gobierno del presidente Nicolás Maduro contra los medios independientes.
Conatel realizó el 1º de febrero una «inspección técnico administrativa» a las instalaciones de Globovisión con el argumento de que el canal privado de noticias tiene la concesión vencida. En Venezuela alrededor de 800 estaciones de radio y todas las televisoras tienen sus concesiones de transmisión vencidas.
Se sabe que el gobierno mantiene esta situación, bajo la amenaza de cerrar administrativamente y bajo apariencias de legitimidad a todo aquel medio que critique al gobierno o divulgue información que el gobierno considera lesivas para su imagen, informó la SIP a INFOREGIÓN.
Además de Globovisión, el canal Televen está en la mira del gobierno. Ambos medios han dado cobertura equilibrada a las acciones en la nueva Asamblea Legislativa donde el chavismo ya no es mayoría. Maduro cuestionó a ambas televisoras en público y prometió acciones concretas.
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Claudio Paolillo, director del semanario uruguayo Búsqueda, dijo que «ante este renovado mecanismo de extorsión contra los medios independientes, las entidades intergubernamentales del continente deberían reaccionar, ya que esta es una prueba fehaciente de que el gobierno de Maduro no le interesa la democracia ni todos los mecanismos internacionales que se han dispuesto para protegerla de los regímenes autoritarios».
Por su parte, el periodista Vladimir Villegas expresó en su programa que transmite Globovisión que la concesión «no la tenemos vencida por irresponsabilidad del canal, sino porque desde hace un año se hicieron todos los trámites y hasta ahora no se ha tenido la respuesta».
Argumentó que la inspección buscó amedrentar a los trabajadores. Conatel rechazó las opiniones de Villegas a las que calificó de «falsas y desinformadas».
Mientras tanto, Corporación Maneiro ha dispuesto que para vender papel a los diarios, estos deben reducir su circulación en un 60%, afectando sus ya limitados espacios para publicar información. En el caso de El Nacional y con el argumento de que el periódico contaría con reservas escondidas de papel para varios años, no fue considerado por el ente gubernamental para el suministro del insumo.