SIP: Ley de Comunicación de Ecuador es la peor “ley mordaza” de América

A pocos días del segundo aniversario de la Ley Orgánica de Comunicación del Ecuador, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) hace un llamado a la comunidad internacional, en especial a la Asamblea General de la OEA, para que se advierta “el flagrante atropello del gobierno de Rafael Correa contra el derecho del público a estar informado, contra el trabajo libre de los periodistas y contra los medios de comunicación privados e independientes de su país”.

El 23 de junio se cumplirán dos años de vigencia de la Ley de Comunicación, a la que la SIP ha calificado como “un instrumento de inquisición que convirtió al presidente Correa en el gran censor de las Américas”.

La organización criticó esta legislación desde que el Presidente la propuso hace cuatro años, vaticinando que sería utilizada para acallar a sus adversarios políticos, al periodismo independiente y a los ciudadanos en su uso de redes sociales e internet.

La SIP viene indicando que la ley es ilegítima, que se aplica en forma discriminatoria y revanchista contra los medios y periodistas independientes a través de organismos que dependen del Poder Ejecutivo, con el ánimo explícito de censurar el libre flujo informativo y las distintas corrientes de opinión.

En los últimos meses y ante casos irrisorios de censura previa, la SIP se solidarizó con varios medios y periodistas que desafiaron al gobierno no acatando las sanciones, amparándose en su derecho constitucional a la resistencia.

“No estábamos equivocados – dijo el presidente de la SIP, Gustavo Mohme – sabíamos que esta ley haría oficial la censura y que los ciudadanos serían los grandes perdedores, al ver vapuleado su derecho humano a estar debidamente informados”.

Mohme, en referencia al discurso de esta semana del nuevo secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), el uruguayo Luis Almagro, al inicio de la 45 Asamblea General en Washington, DC, en el que pidió una “agenda positiva”, indicó que “no hay nada más positivo que este organismo empiece a exigirle a los estados que cumplan con la Carta Democrática Interamericana”.

Mohme, director del diario La República de Perú, dijo que en esta nueva etapa de la OEA, a la que se le está deseando que sea más eficiente, “debe haber un compromiso mayor para que se entienda que sin libertad de prensa y de expresión no puede haber verdadera democracia, como indica la Carta”.

La SIP resaltó que las estadísticas sobre las sanciones muestran claramente cómo la Ley de Comunicación es aplicada en forma discriminatoria y como escudo de funcionarios, muchos de los cuales la utilizan como mecanismo de revancha ante críticas a su función.