La postergada carretera Huamanga – San Francisco, que une casi 157 kilómetros existentes entre la capital ayacuchana y San Francisco en el VRAE, debería ser culminada para «integrar todos los caseríos» y «solucionar un problema social existente desde hace 25 años», remarcó el premier Yehude Simon.
Dicha vía está solamente asfaltada en un pequeño primer tramo (Huamanga – Quinua), mientras que poco más de 146 km solamente está afirmada y se torna intransitable en épocas de lluvias. San Francisco es la capital del distrito de Ayna, uno de los ocho que conforman la provincia de La Mar.
Así, dijo Simon, los faltantes 146 kilómetros se pueden realizar con fondos existentes provenientes del canon minero. En ese sentido, mostró su confianza en que todos los gobiernos regionales que saben de esa crítica situación harán alguna alianza para que el canon minero pueda servir a resolver los problemas que no puede resolver el Ministerio de Economía.
Por su parte, el experto Rubén Vargas consideró el asfaltado de los 146 kilómetros faltantes de esta abandonada carretera que actualmente es solo una trocha es vital para interconectar la economía regional de los campesinos con la de todo el territorio nacional.
Igualmente, consideró de imperiosa necesidad electrificar la zona porque existe un déficit que no permite potenciar el desarrollo de las agroindustrias, especialmente en café orgánico. También pidió dotar de condiciones de seguridad a la zona porque actualmente se encuentra en peligro no solo por los remanentes de Sendero Luminoso y el narcotráfico, sino por la delincuencia que asalta con frecuencia en la carretera.