Siete muertos y 26 heridos de gravedad fue el saldo que dejo la volcadura de un ómnibus de la empresa de transportes ‘Cholito Bus’, en la ruta a San Francisco, aproximadamente a dos kilómetros del puesto policial de Machente en el distrito de Ayna en el valle de los ríos Apurímac y Ene (VRAE).
El ómnibus que cubre la ruta Huamanga – San Francisco, partió la noche del lunes a las 7:30 de la noche de Huamanga rumbo hacia el VRAE. Aproximadamente a las 2:30 de la madrugada y tras una peligrosa maniobra se despistó y volcó aparatosamente a una pendiente de 250 metros a la altura del Centro Poblado de Ayna a dos kilómetros del puesto policial de Machente.
Tras los llamados de auxilio de los accidentados, trabajadores de la empresa Consorcio Pichari, empresa encargada del mantenimiento de la carretera Quinua – San Francisco, dieron parte a los efectivos policiales del Grupo de Operaciones Antidrogas (GOA-Machente) quienes de inmediato acudieron al rescate de los accidentados.
Penoso rescate
Desde las primeras horas de la mañana y en presencia del fiscal, el alcalde de San Francisco, Eduardo Urbano, personal policial y pobladores de la zona, acudieron al rescate de los heridos y los siete muertos que dejó el fatídico accidente.
Al penoso rescate se sumó la municipalidad de Kimbiri a través de la habilitación de una unidad móvil para el traslado de los heridos al Hospital Regional de Ayacucho.
Según informó a INFOREGION la titular de la Segunda Fiscalía de Ayna San – Francisco, Sandra Pimentel, solo se pudo identificar el cuerpo de Juan Platas Amao, docente de la Institución Educativa San Francisco.
Los otros seis fallecidos, entre ellos una mujer, permanecen aún como NN.
“Nosotros nos hemos constatado en el lugar de los hechos, y se ha registrado siete muertos, entre ellos una mujer y sólo se ha podido identificar a uno de ellos. Hasta el momento ningún familiar se ha acercado para hacer el reconocimiento respectivo de los cadáveres”, aclaró.
De acuerdo a las versiones de los heridos y los efectivos policiales constituidos en el lugar del accidente se presume que el accidente fue originado por la negligencia del propio chofer Julio Andrés Cáceres de 26 años de edad, quien se habría quedado dormido.
Julio Cáceres, al igual que el copiloto del ómnibus, se arrojaron del vehículo al percatarse de la emergencia, logrando quedar ilesos. Lamentablemente sus pasajeros no tuvieron la misma suerte.
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