La muerte le llegó a plena luz del día, cuando menos lo sospechaba. Carlos Enrique Ceopa Tello, de 27 años, chofer de mototaxi, comía tranquilamente un cebiche al paso en un restaurante al norte de la ciudad, cuando súbitamente fue acribillado, mientras que su acompañante se debate entre la vida y la muerte en la unidad de cuidados intensivos del hospital de Tingo María.
De acuerdo con la PNP, se trataría de un ajuste de cuentas. Carlos Enrique había estacionado su unidad móvil a unos metros del lugar del crimen y empezaba a degustar su plato preferido, cuando tres sujetos con los rostros cubiertos bajaron de otro mototaxi. Uno de ellos preguntó: “¿Este gordito? ¿Cuál de los dos gorditos es?”.
Carlos Enrique recibió varios disparos en la parte occipital del cráneo y se desplomó sin vida en el acto. La policía investiga el extraño crimen y se recordó que hace algunos años Carlos Enrique perdió a uno de sus hermanos en idénticas circunstancias.
Su acompañante, Weider Isla Luna, de 35 años, era el “otro gordito”. Recibió tres impactos de bala en el vientre, que le comprometieron órganos vitales. Los atacantes se marcharon rápidamente del lugar.
Médicos del hospital de Tingo María operaron de emergencia a Isla Luna, y lograron extraerle los proyectiles. Mientras tanto, el cadáver de Carlos Enrique Ceopa Tello fue levantado del lugar por orden del representante del Ministerio Público y con apoyo de efectivos de la delegación policial.