Un sicario ultimó a balazos a un taxista delante de su esposa e hijo en la ciudad de Tingo María, capital de la provincia de Leoncio Prado, Huánuco. El asesino, antes de matar a su víctima, lo abrazó y le dijo algunas palabras, señalaron testigos a INFOREGIÓN.
El crimen ocurrió aproximadamente a las 7:35 de la noche del martes, cuando Pedro Luis Herrera Romero (49) cenaba junto a su esposa e hijo en un puesto de comida en el sector Afilador, a dos kilómetros y medio de Tingo María. De acuerdo a los testigos, el criminal llegó al lugar en una motocicleta lineal acompañado de una mujer. Ambos esperaron al taxista en el grifo La Perricholi, ubicado a un costado del puesto de comida.
El sicario, que vestía un polo y pantalón verdes, descendió de la motocicleta tras echar combustible al vehículo, recorrió los escasos 20 metros que lo distanciaban de su víctima, preguntó qué había de comer a la señora que atendía el negocio y cuando su víctima se levantó para dirigirse hacia su mototaxi aprovechó y como quien intenta decirle algo lo abrazó a un costado de la mototaxi y le disparó a quemarropa un balazo que ingresó por la nuca y salió formando un orificio en el rostro.
La víctima murió instantáneamente ante la aterrada mirada y los desesperados gritos de sus familiares, mientras el criminal nuevamente subió a la motocicleta conducida por la mujer y huyeron raudamente. Las primeras personas que llegaron al lugar intentaron ayudar al herido, pero se dieron cuenta que el ataque había sido fatal.
Al llegar la policía se iniciaron las primeras pesquisas sobre lo ocurrido y se maneja la hipótesis que el crimen de Pedro Luis Herrera Romero, conocido con los apelativos “Pedrín” o “Máscara”, se trate de un ajuste de cuentas, dado que las características del asesinato son propias de este tipo de hechos.