Serenos hicieron de parteros en Tingo María

Domitila Ulli Ambicho estaba con dolores de parto y necesitaba ser atendida de urgencia. A su esposo, Félix Juanan Ramírez, no se le ocurrió mejor idea que llamar al Serenazgo de Leoncio Prado, cuya oportuna intervención logró salvar la vida de un bebé y de su madre, quienes encontraron en los integrantes de este cuerpo municipal a sus salvadores en las más difíciles circunstancias.

Eran pasadas las 11 de la noche del miércoles, cuando Félix llamó desesperadamente al Serenazgo desde el Asentamiento Humano 1º de Julio. Inmediatamente la unidad móvil Nº 2 integrada por los serenos Jorge Tapullima, Alfredo Huamán y César Flores al mando del técnico PNP Julio Murrieta “Murdock”, que ingresaban de servicio a esa hora, acudieron al lugar y auxiliaron a la mujer.

Grande sería la sorpresa de los serenos cuando observaron que la cabeza del bebé se encontraba prácticamente afuera, por lo que hicieron de parteros y ayudaron a que la nueva criatura viera la luz. Luego de tener el bebé en sus manos, los serenos cortaron el cordón umbilical y trasladaron al recién nacido y a su madre al Hospital de Tingo María.

En el nosocomio los médicos les dieron la atención pertinente y verificaron que ambos se hallaban en buen estado, fueron internados y hoy serían dados de alta. El padre del menor agradeció a los serenos por su valiente y oportuna actuación.