Sepa cómo elegir buen pescado para la Semana Santa

En los próximos días miles de peruanos conmemoran las celebraciones por Semana Santa, y es probable que el pescado sea el protagonista en el menú de nuestros hogares, sin embargo, si no se tiene cuidado en su selección, limpieza y preparación, quienes lo consumen, pueden ver su salud afectada por ejemplo, con una intoxicación alimentaria.

Al respecto, el nutricionista del Centro Nacional de Alimentación y Nutrición del Instituto Nacional de Salud, Luis Aguilar Esenarro, brindó recomendaciones para evitar consumir un pescado en mal estado.

Selección de un pescado fresco y sano

  • Evitar pescados que tengan escarcha o cristales de hielo, ya que puede significar que han estado almacenados demasiado tiempo o que se descongelaron y volvieron a ser congelados.
  • El olor debe ser fresco y debe tener buena textura. “El pescado fresco huele poco, por tanto, un olor fuerte es señal de que no está fresco”, enfatizó.
  • La piel debe estar brillante y sin heridas; y que las escamas estén adheridas a la piel, éstas no se deben desprender fácilmente; si se pasa el dedo por encima y caen muchas escamas significa que no está fresco.
  • Verificar que los ojos de los pescados estén claros y brillantes, no deben estar opacos ni hundidos.
  • El músculo o la carne del pescado fresco siempre deben estar firme al tacto. Si al presionar vuelve a su sitio rápidamente, está fresco.
  • Las agallas o branquias del pescado fresco son de color rojo intenso. Si usted observa un color gris o amarillento, no lo compre.

Adecuada refrigeración

  • Se recomienda a los consumidores adquirir estos productos en sitios de comercio con  refrigeradores de 0°C a 4°C y/o en congeladores mínimo de -18°C, los cuales deben contar con instrumentos para la medición de la temperatura, que garanticen su conservación.
  • Siempre que adquiera estos productos verifique que las personas encargadas de la manipulación del pescado cuenten con vestimenta adecuada y con buenas prácticas higiénicas.
  • Para congelarlo, asegúrese de que le hayan retirado las vísceras y escamas. Puede limpiarlo con un paño húmedo, sin exponerlo al agua directamente; y luego, cortarlo en trozos o filetes, y guardar las piezas en una bolsa de plástico transparente o en un recipiente que cierre herméticamente.
  • Una vez descongelado, nunca volver a congelarlo. No se recomienda descongelar el pescado a temperatura ambiente. Lo correcto es pasarlo del congelador al refrigerador, la noche anterior a su preparación.
  • En el caso de las conservas de pescados (atún, sardinas, entre otros), es importante verificar la información contenida en la etiqueta, en especial que cuente con el registro sanitario y fecha de vencimiento vigente. Otra característica para tener en cuenta es que las latas no deben estar golpeadas, ni presentar signos de abolladura ni de oxidación, así como tampoco deben estar hinchadas ni desprender gases ni olores extraños al destaparlas, porque pueden ser señales de contaminación.