Un discurso dirigido a 50 dirigentes terroristas, en setiembre de este año, abrió una fisura al interior del bloque senderista enquistado en los Valles de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem).
Franklin Grover Tello Ichaccaya, «Lucio», sucesor de «William», el N° 4 de Sendero Luminoso en el Vraem, encomendó a sus hombres de confianza expandir un nuevo mensaje: la incapacidad de «Raúl» como mando ideológico. La pugna de poderes era evidente.
Y es que «Lucio», según fuentes de inteligencia de la Policía Nacional, se rehúsa a seguir órdenes de Jorge Quispe Palomino, «Raúl», por su «ignorancia» e «incapacidad», factores que encendieron las alarmas al interior de la sanguinaria cúpula. No sería la primera vez.
«LUCIO»
En setiembre del 2012, Víctor Hugo Crespo Ramírez (43), camarada «William», quizá el francotirador más despiadado de SL, cayó a manos de un fino trabajo de inteligencia desplegado por las fuerzas combinadas, valiéndose de interceptaciones radiales e informantes clave.
La misma suerte corrieron «Alipio» (46) y «Gabriel» (37), abatidos bajo el método de seguimiento y vigilancia heredados del mítico Grupo Especial de Inteligencia (GEIN), en agosto del año pasado.
Fue allí cuando Tello Ichaccaya, «Lucio», reclutado el 2005, pasó a formar parte del núcleo político/militar de Sendero Luminoso, básicamente por sus estudios superiores y consecuente influencia.
Si bien Víctor Quispe Palomino, «José», es el N° 1 en el VRAEM, el puesto de «ideólogo» quedaría en manos del N° 2.
IDEOLOGÍA
Su formación educativa, a diferencia del resto de miembros que fueron adoctrinados en la espesura de la selva, fue determinante en la decisión. Sus estudios en Sociología en la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga (UNSCH) -la misma que le facilitó a Abimael Guzmán la captación de cuadros durante su etapa de profesor- le permitió subir peldaños impartiendo su ideología «marxista, maoísta, leninista» al interior de la agrupación, compuesta por, aproximadamente, 300 miembros.
Es esa misma formación la que utiliza ahora para derrocar a «Raúl», aduciendo que la «educación partidaria» es la base «mínima» que debería ostentar el N° 1 de Sendero Luminoso en el Vraem.
A diferencia del tercer hermano del clan Quispe Palomino, «Lucio» continúa sembrando el denominado pensamiento «Gonzalo», semilla negra que encuentra su caldo de cultivo en el desierto de la pobreza y la ignorancia.
Pese al fraccionamiento interno que podría suscitar, gran parte del aparato terrorista, no obstante, le habría expresado su confianza.
RELEGADO
La noticia corrió como reguero de pólvora. «Raúl», quien advertía desde 2005 la postura «revisionista» de «Lucio» y sus riesgos, decidió relegarlo -al igual que a ocho miembros de su entorno- a los valles de Cumpiriashiato y Alto Laguna, en la localidad de Kiteni, La Convención (Cusco), a 90 kilómetros de Pichari, en reemplazo del camarada «Renán», no sin antes sostener un duro intercambio de palabras.
Son aproximadamente 160 kilómetros que separan actualmente a «Lucio» y «Raúl», quien se encuentra oculto en la infinidad de la selva.
Fuentes de la PNP sostienen que se desplazaría por el contorno de la margen izquierda del río Mantaro, distrito de Pangoa, Satipo, Junín, resguardado cobardemente por los denominados «pioneritos», niños de aproximadamente diez años.
En 2005, como se recuerda, el clan ayacuchano le exigió severas muestras de lealtad. Una fue la incorporación de familiares suyos a la facción. Sus hermanos «Víctor», quien falleció en octubre de 2011 en la provincia de Jauja (Junín), y «Melania» fueron los primeros.
Apenas meses después, sus primos «Cristian» y «Joel» abandonaron la facción por temor a represalias.
La confrontación, aseguraron fuentes de inteligencia, se agrava debido a la codicia que envuelve a los miembros del Comité de Dirección. Solo ellos, explican, gozan de ciertos beneficios y privilegios, así como de los cupos cobrados a los traficantes que operan en la zona.