Como parte de la vigilancia zoosanitaria activa, el Ministerio de Agricultura y Riego, a través del Senasa, realizó la inspección clínica de animales en los distritos de Luya y Conila, región Amazonas. La jornada se dispuso luego de la notificación realizada por ganaderos de la zona, que indicaban la presencia de animales enfermos y muertos en predios del sector.
Para descartar brotes de rabia silvestre y piroplasmosis, se colectaron muestras (sangre y/o encéfalo) que serán analizadas por la Unidad del Centro de Diagnóstico de Sanidad Animal. En la visita, se realizó la evaluación sanitaria de cada animal para tener un diagnóstico de lo que viene sucediendo con el ganado de la zona.
De manera complementaria, la autoridad sanitaria desarrolló charlas de capacitación para fortalecer el conocimiento de los ganaderos en el manejo y control de enfermedades. Durante la jornada se les exhortó a reportar los casos que se presenten para su atención inmediata.
Enfermedades en el ganado
La rabia es una enfermedad transmitida por mordeduras de murciélagos hematófagos. El virus ataca el sistema nervioso central, afectando a todos los animales de sangre caliente, principalmente bovinos, equinos, porcinos, ovinos/caprinos, incluidos los humanos, informó el Senasa a INFOREGIÓN.
Los principales síntomas incluyen cambios en su comportamiento, incoordinación del tren posterior, salivación, temblores musculares, parálisis, postración y muerte. Para su prevención el Senasa recomienda la vacunación periódica del ganado y control selectivo de murciélagos hematófagos.
La piroplasmosis bovina es causada por un parásito, que durante su ciclo de vida debe pasar por una garrapata hembra para asegurar la trasmisión de la enfermedad. Los síntomas van desde fiebre alta, presencia de sangre en la orina, decaimiento y falta de apetito. Como medida preventiva, se recomienda mantener al ganado alejado de pastos infestados por garrapatas, realizar baños periódicos contra ectoparásitos, etc.
La ganadería es la segunda actividad económica más importante en Amazonas, después de la agricultura. La región cuenta con una población de 232 mil cabezas de ganado vacuno, concentrándose principalmente en las provincias de Luya, Chachapoyas, Rodríguez de Mendoza, Bongará y Utcubamba.