Se graduaron 240 efectivos, cinco de ellos, integrantes de comunidades asháninkas.
También se puso la primera piedra para la construcción de la nueva sede de la escuela y base antidrogas de Ayacucho que se concretará en el marco del convenio con el gobierno de los EE.UU
El ministro del Interior, Luis Alva Castro, asistió hoy a la ceremonia de clausura y graduación de la primera promoción de suboficiales de la Policía Nacional de la Escuela Técnico Superior de Ayacucho y a la colocación de la primera piedra para la construcción de su nueva sede y base antidrogas, ubicada en la urbanización Quicapata, cerca del aeropuerto de la ciudad.
El nuevo local de la escuela, que se construirá con una inversión de 10.5 millones de dólares albergará también la nueva base de la Dirección Nacional Antidrogas (DIRANDRO) de la Policía Nacional que tendrá una capacidad para formar a 350 efectivos policiales en amplias y modernas instalaciones que estarán dotadas de la más alta tecnología.
La Escuela Técnica de la PNP de la Policía Nacional del Perú en Ayacucho (ETS-PNP-Ayacucho) forma policías especializados en lucha antidrogas en las regiones amazónicas y alto andinas, con el propósito de operar en las agrestes zonas productoras de cocaína.
Los postulantes no están obligados a depositar una garantía económica, para iniciar sus estudios ya que este trámite es totalmente gratuito y a fin de contribuir a la pacificación de la zona, los nuevos suboficiales que egresan, se comprometen a servir por tres años en la región Ayacucho, sobre todo en los puestos alejados y en las nuevas comisarías que se instalarán en el valle del río Apurimac y Ene (VRAE).
La primera promoción. La primera promoción que egresó hoy, está compuesta por 240 efectivos, de ellos el 50% son jóvenes ayacuchanos y el 50% restante proceden de otras regiones cercanas a Ayacucho. Cabe resaltar que aproximadamente un tercio de la promoción está integrada por mujeres.
Los graduandos tienen el quechua como lengua materna y además dominan el idioma castellano, lo que les permitirá en su condición de bilingües, establecer una comunicación directa con los pobladores de las zonas rurales, favoreciendo una cultura de paz e integración.
Asháninkas al servicio de la seguridad. En esta primera promoción policial destacan cinco integrantes de comunidades asháninkas, que tras graduarse prestarán servicios en puestos policiales ubicados preferentemente en el Valle del Río Apurímac-Ene (VRAE), contribuyendo de esta manera a fortalecer los lazos entre el Estado y su comunidad.
Es importante mencionar que las Escuelas de la PNP de Ayacucho, Santa Lucía (en la región San Martín), y Mazamari (en Junín) cuentan con la cooperación económica del Gobierno norteamericano, en el marco del convenio bilateral antidrogas suscrito entre el Perú y los Estados Unidos.
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