El general Miguel Hidalgo Medina, Director Nacional Antidrogas de la Policía Nacional, afirmó que la resiembra de hoja de coca en áreas previamente erradicadas genera gran preocupación, y viene siendo analizada para plantear una respuesta adecuada.
Fue durante la jornada inaugural del foro de Periodismo de Investigación y Narcotráfico organizado por el Instituto Prensa y Sociedad, IPYS, con el auspicio de USAID, en Miraflores.
«Si hacemos un cálculo aproximado, habremos erradicado unas 90 mil hectáreas de hoja de coca desde las primeras operaciones (en los años 80). Sin embargo hoy seguimos por las 54 mil hectáreas. Ese es uno de los grandes retos que tiene el Estado y las instituciones comprometidas con la lucha antidrogas», señaló el jefe policial.
Hidalgo Medina afirmó que en ese marco se busca romper el vínculo económico existente entre el campesino cocalero y el narcotráfico, y lograr que se incorpore a la promoción de los cultivos alternativos en la región.
Un segundo reto es el consumo de droga de los peruanos, que hasta hace un tiempo no era motivo de preocupación porque la producción de drogas salía siempre hacia el exterior.
Sin embargo, precisó que este tema en la actualidad ha tomado una considerable importancia. «En el Perú de hoy hay un consumo aproximado de 18 toneladas de droga al año. Y año a año cientos de jóvenes se van involucrando en el consumo. ¿Qué programas estamos trabajado para que generemos en la juventud mecanismos de defensa que les permita estar alejados de esa tentación?», se preguntó.
Hidalgo Medina dijo que como parte de esta lucha contra el delito también se ha enfocado el problema de la provisión de insumos químicos hacia los valles cocaleros, investigando a empresas y grandes grupos familiares dedicados a este negocio. «Los desviadores de insumos químicos sólo hacen eso, desviar las sustancias hacia los valles cocaleros y tener una distribución rápida», agregó tras indicar que ya son cuatro las organizaciones intervenidas por las autoridades.
Advirtió que las mafias de producción de drogas están recurriendo a ingeniosas formas para eludir la acción policial, utilizando sal de mesa, cemento y otros productos que no están fiscalizados, pero que igualmente sirven para elaborar la cocaína. Por eso, llamó la atención a las diversas instancias del Estado, como PRODUCE y Aduanas, para neutralizar esta estrategia.