El lunes último, por la noche, el ministro del Interior Wilfredo Pedraza reunió en su despacho del piso 4 de Córpac al flamante director de la Policía, general Jorge Flores (57), y a otros dos altos mandos: los generales PNP Carlos Morán y César Cortijo.
El encuentro debía interpretarse como una vuelta de página a la era Salazar y así parecía indicarlo el hecho de que Morán, enviado al huesero a inicios de año, sería ahora el N» 2 de la institución como jefe de Estado Mayor, puesto que le corresponde por antigüedad.
A ambos les pidió apoyar a Flores, trabajar en equipo y ayudar a rescatar a la Policía de la crisis en la que la dejaba el saliente general PNP Raúl Salazar.
La lucha contra la corrupción, subrayó Pedraza, era un tema fundamental para lograrlo.
El nombramiento de Flores, que venía desempeñándose como Inspector General, es un mensaje en ese sentido, según el Ministro.
¿Cómo combatirla?
Flores, ex Guardia Civil, propuso crear un grupo de inteligencia al interior de la Inspectoría como única alternativa para detectar los negociados de la Policía, sobre todo en los niveles más altos.
Es que todavía estaba fresca la abrupta despedida de Salazar.
El saliente director de la Policía se tomó 40 minutos para despedirse con un desafiante alegato político nunca antes visto en una ceremonia tradicional como el «cambio de mando».
«Yo no soy un mentiroso. Acá me enseñaron a no ser ratero. Nunca hice mal uso de los recursos del Estado», clamó entre gritos.
Salazar negó que la esposa de su exsecretario de confianza y actual Agregado de la Policía en Colombia, coronel Gino Coletti, haya remodelado su despacho por S/. 110,000 (CARETAS 2273).
Admitió que la Constructora Alemar, de Nathalie Perea, sí refaccionó las oficinas de la Dirección General (Dirgen), qué el comandaba, pero no la suya y desafió: «Que me saquen, pero nunca me van a sacar por corrupto. ¡Porque no lo soy!».
Pero el caso de la oficina de Salazar es solo la punta del iceberg.
NEGOCIOS MILLONARIOS
CARETAS obtuvo abundante documentación que revela que los esposos Coletti-Perea, a través de empresas en las que ellos mismos aparecen como apoderados o que tienen como titulares a sus familiares más cercanos, han hecho negocios con la Policía por más de S/. 5.5 millones.
El grueso de contratos se realizó entre el 2011 y el 2012, es decir, cuando el coronel Coletti se desempeñaba primero como jefe de la Central de Operaciones de la Dirección General, despachaba directamente con Salazar y fungía en la práctica como su secretario, y luego como Agregado Policial en Colombia.
El artículo 10 de la Ley de Contrataciones prohibe a los familiares de funcionarios públicos, hasta el cuarto grado de consanguinidad o segundo en afinidad, realizar negocios con el Estado.
Esto significa que si la esposa y los familiares directos de quien fuera el ayudante del director de la PNP obtuvieron millonarios contratos en la Policía es porque contaban con un respaldo al más alto nivel que los hacía invulnerables a la ley.
Entre los años 2011 y 2012 ganó S/.1’593,034 en contratos con la PNP, de acuerdo al portal de Transparencia del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
La compañía, según la SUNARP, registra la misma dirección fiscal de Constructora Alemar, en el Jr. Lloque Yupanqui, Jesús María.
• Distribuidora Regal International Servicios Generales EIRL. En los últimos dos años ganó licitaciones con la Policía por S/.1’093,291. La gerente Sheilla Ledesma Mendoza es socia fundadora de Constructora Alemar junto a Nathalie Perea, según la Superintendencia Nacional de Registros Públicos (SUNARP).
• Ofigraph Multy Service EIRL. Obtuvo contratos con la PNP por S/.909,008 entre el 2011 y el 2013. Su gerente general es Ricardo Perea Mendoza, hermano de Nathalie, según la SUNARP.
• Jean Pierre Iván Perea Ascate. Ganó concursos públicos en la Policía por S/.699,772 en los dos últimos años. Jean Perea Ascate es sobrino de Nathalie Perea. Este aparece también como socio de otra empresa del clan familiar: Uniform Sniper EIRL., según la SUNARP.
• Uniform Sniper EIRL. Ha ganado entre el 2011 y lo que va del año S/,600,000 en negocios con la PNP, según el MEF. El apoderado de esta empresa, según SUNARP, es el propio coronel PNP Gino Coletti.
MODUS OPERANDI
Un caso singular es el de la empresa Mirage Corporation EIRL. que ha hecho negocios de menor cuantía con la PNP por S/. 74,000.
Dicha firma tenía como gerente a Ana Torres Cabrera (34), pero ella declaró a CARETAS que los hermanos Perea Mendoza la presionaron para que aparezca como titular de Mirage Corporation. «¡Yo no tenía ni idea de cómo funcionaba una empresa! Yo solo era una vendedora, cotizaba y hacía algunas compras», dice ahora.
«La corrupción es el problema central de la Policía y es lo que impide que haya una lucha eficaz contra la delincuencia. Lo que es peor es que si el de arriba roba, los de abajo harán lo mismo», reflexiona el exministro del Interior, Fernando Rospigliosi.
Una persona del entorno más cercano de los esposos Coletti-Perea se contactó con CARETAS para alegar que no solo ellos hicieron negocios con la Policía, sino también la propia familia de Salazar.
Esta persona, que pidió no ser identificada, entregó documentos en los que aparece la empresa Inversiones Lumi SAC como proveedora de la Dirterpol en una serie de negocios realizados en 2012.
Según esta versión, Inversiones Lumi le pertenece a Rosario Salazar, presunta hermana del saliente director de la Policía, pero en dicha empresa lo negaron.
«No solo es un caso», dijo: ‘Todos se levantaban en peso a la Policía». (Américo Zambrano, Eduardo García)
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