A partir del atentado de Sanabamba, Ayacucho, Cuarto Poder decidió estar con la primera línea de defensa contra Sendero Luminoso, los ronderos que hoy padecen el abandono del Estado.
Nadie como ellos conocieron la muerte del terror cuando en Lima la violencia de Sendero Lumino era apenas una amenaza lejana.
Estos peruanos campesinos fueron durante años, antes que las Fuerzas Armadas y la Policía, la primera línea de resistencia ante el incontenible avance del terrorismo. Son los llamados comités de autodefensa. Más de medio millón de peruanos a quien el propio estado dotó de armamento militar.
El analista Rubén Vargas analiza la situación en el VRAE. Además, por cortesía de INFOREGIÓN, se tienen las declaraciones de representantes de los Comités de Autodefensa, CAD’s, en el VRAE.