Las caudalosas aguas del río Apurímac se tragaron literalmente a una persona y ocasionaron la inundación de numerosas viviendas de los distritos de San Francisco y de Kimbiri, ubicados uno frente a otro en el valle de los ríos Apurímac y Ene, VRAE y sólo separados por el caudaloso río que sigue aumentando peligrosamente su caudal.
Las torrentosas aguas vienen socavando los cimientos de numerosas viviendas que se encuentran en sus orillas, las mismas que podrían colapsar en cualquier momento.
Hace algunas semanas la población y las autoridades bajaron la guardia y disminuyeron las acciones de prevención creyendo que el caudal del río había llegado a su clímax y que comenzaría a descender.
Sin embargo desde el día de ayer (miércoles) el río Apurímac comenzó a incrementar peligrosamente su caudal y sus aguas ingresaron a las viviendas que se encuentran en las riberas del río en el lado de Kimbiri, obligando a sus angustiados ocupantes a ponerse a buen recaudo y rescatar lo que se podía de la invasión de las aguas.
Instalados en carpas
Momentáneamente los damnificados fueron reubicados en 25 carpas instaladas por los trabajadores de la municipalidad en el patio del mercado principal.
Sin embargo los afectados señalaron que estas carpas de Defensa Civil no son seguras y podrían ser fácilmente destruidas e inundadas por las lluvias y los fuertes ventarrones.
Los funcionarios de Defensa Civil de la municipalidad de Kimbiri, informaron a INFOREGIÓN que varias decenas de familias se quedaron prácticamente en la calle debido a la inundación que arrasó las viviendas del centro poblado de Samaniato.
Mientras que en el centro poblado de Palestina, adicionalmente a la inundación de las viviendas se perdieron también diez hectáreas de cultivos de cacao y otros cultivos de pan llevar.
En relación al distrito ayacuchano de San Francisco, la situación se torna parecida, pues 370 familias resultaron afectadas por la inundación de sus viviendas y todos los objetos de valor que se encontraban en ellas.
Emergencia en San Francisco
La municipalidad de San Francisco, inmediatamente movilizó la maquinaria pesada para realizar los trabajos de contención a fin de aminorar los daños que viene generando la crecida del río; sin embargo la furia de la naturaleza fue más fuerte; por lo que los afectados fueron reubicados temporalmente en una institución educativa.
“Ya hemos remitido una solicitud de apoyo al gobierno regional de Ayacucho para que nos envíen carpas, ropas de cama y alimentos para las 73 familias damnificadas. Pero más allá de ello estamos pensando promover un proyecto de defensa ribereña para prevenir estos hechos en el futuro”, señaló el alcalde de San Francisco, Edwin Huamán.
Desaparecido
En el informe presentado por la municipalidad, también se hace referencia a una persona desaparecida, aunque no fue identificada.
Según los testigos se trataría de un indigente que acostumbraba pernoctar a orillas del río y que al momento de ser arrastrado por las aguas se encontraba en estado etílico.
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