Advierten disparidad numérica del personal de enfermería entre países

El primer informe sobre el «Estado de la enfermería mundial», lanzado el 7 de abril por el Día Mundial de la Salud, refleja las disparidades entre los sistemas de salud de los países ricos y los pobres. Los desequilibrios mundiales del personal esencial de enfermería se exacerban debido a la incapacidad de los países desarrollados para educar y capacitar a sus propias enfermeras, afirman los autores del informe.

Europa y América tienen en promedio de 81 enfermeras por cada 10 mil habitantes. Mientras que en el Pacífico Occidental, la proporción es de 36 enfermeras por cada 10 mil habitantes. Asimismo, en África hay 8,7 enfermeras cada 10 mil habitantes, y en el sudeste asiático y el Mediterráneo oriental, alrededor de 16 por cada 10 mil.

“Retener al recurso humano es tan importante como su reclutamiento. Y retención significa que tenemos que tomarnos de manera mucho más seria el mejoramiento de las condiciones de trabajo”, afirmó Howard Catton, jefe ejecutivo del Consejo Nacional de Enfermería.

“El 80% de las enfermeras del mundo actualmente sólo atiende al 50% de la población del mundo”, refirió Mary Watkins, presidenta alterna de Nursing Now, que produjo el reporte conjuntamente con el Consejo Internacional de Enfermería (ICN por sus siglas en inglés) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

A estas regiones con escaso personal, en 2030, les faltarán 5,7 millones de enfermeras, estima el informe. “Eso significa un déficit de más del 20%, pero sabemos que es incluso más alto en ciertas regiones debido a la mala distribución que tenemos”, mencionó Catton.

El mapa adjuntado en esta nota muestra la amplia variación en la densidad del personal de enfermería en relación con la población; las mayores diferencias se muestran en países de las Regiones de África, Asia Sudoriental y Mediterráneo Oriental y en algunos países de América Latina.

Los datos de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) muestran que el número de enfermeras capacitadas en el extranjero se incrementó más del 20% entre 2006 y 2016 en los estados ricos. «En los países de altos ingresos tenemos una dependencia excesiva de la migración”, concluyó Catton.

“Sabemos que la migración ha sido un problema desde hace tiempo, y parece que podría ponerse peor, también debido al envejecimiento de las poblaciones de Europa y América. Si despojan a los países de ingresos bajos y medianos, se exacerbará la escasez y la mala distribución”, sostuvo

«El reporte muestra suficiente evidencia de por qué invertir en la fuerza laboral de la salud y la enfermería, y puede ayudar a discernir adónde debería ir el dinero para que tenga el más alto impacto en la salud de la población», dijo Carey McCarthy, de la OMS. Los datos indican que hay grandes desigualdades y obstáculos, agregó.

El informe completo lo puede visualizar aquí. 

 

Fuente: SciDev.Net