¿Sabía que la industria textil es la segunda más contaminante del planeta pues produce más emisiones de carbono que todos los vuelos y envíos marítimos juntos? ¿Alguna vez se enteró que confeccionar unos jeans requiere de unos 7500 litros de agua? Por ello al reutilizar la ropa estamos contribuyendo a contaminar menos y así evitar la sobreproducción de prendas.
Según la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), la industria de la moda es la segunda más contaminante del mundo después de la petrolera. La misma fuente señala que el rubro del vestido utiliza cada año 93 000 millones de metros cúbicos de agua, un volumen que podría satisfacer las necesidades de cinco millones de personas. Además, cada año se arrojan al mar medio millón de toneladas de microfibra. Ello equivale al efecto de unos 3 millones de barriles de petróleo.
Según datos del Waste & Resources Action Programme (WRAP), organización británica que trabaja con personas y comunidades para lograr una economía circular, en los países de Occidente se estima que -en promedio- una prenda es usada un máximo diez veces por persona. Incluso en ciertos países el 40% de la ropa que se compra nunca se usa.
Las ventajas ambientales en la reutilización de prendas
Es así que comprar ropa de segunda mano se convierte en un hábito sostenible y comprende
muchas ventajas. En principio, muchas veces las prendas que se adquieren son únicas, ya que se pueden conseguir modelos que ya no existen. Además, estas prendas mayormente tienen un precio más accesible por lo que con su adquisición se impulsa el ahorro.
Asimismo, adquiriendo estas prendas damos un apoyo a negocios locales y pequeños emprendimientos que están apostando por una moda sostenible. También, para mucha gente puede convertirse en una manera de generar ingresos extra cuando se tiene ropa en buen estado y que ya no se está utilizando.
Es importante no contribuir en una cultura de desperdicio. Un mejor cuidado de la ropa, así como el uso de prendas de segunda mano ayudan a mitigar el impacto que genera la industria de la moda en el ambiente. Además, se está generando un hábito sostenible y una nueva práctica ambiental.
A continuación, te mostramos algunos emprendimientos peruanos que venden prendas de segunda mano a precios asequibles como el Closet de Josimi, Trapitos de Segunda, The Eunoia Closet, entre otros.
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