Gracias a la oportuna intervención de la Policía de Carreteras, se desbarató el envío de un centenar de loros de la especie aratingas, rescatados de un bus de la empresa “León de Huánuco” cuando eran transportados apiñados dentro de jabas de frutas con destino a la capital de la República.
La acción contra el delito logró salvarles la vida, pues varias aves ya mostraban signos de asfixia. Lamentablemente, un ejemplar no resistió y falleció minutos después del operativo.
Fue reprochable la actitud del chofer de dicha empresa, identificado como Elmer Primo Palomino Anderson, quien lejos de colaborar con los efectivos policiales trató de intimidarlos con palabras de grueso calibre a fin de impedir tal decomiso.
Las inocentes víctimas fueron puestas a disposición del personal del Instituto Nacional de Recursos Naturales (INRENA), que los trasladó al refugio “Mundo Natural”, ubicado en el Hotel Madera Verde, donde se recuperarán hasta los próximos días.