El biologo Flavio Benites habló sobre la instalación de Hábitats artificiales en ecosistemas marinos costeros en el Perú, detallando su diseño, importancia y beneficios para las poblaciones locales y el país. Así lo hizo en una nueva edición de «Biologando», espacio conducido por Sandro Sánchez,
Benites refirió que integra una asociación que busca «el fortalecimiento de la gestión ambiental de zonas marino-costeras a fin de lograr un desarrollo sostenible de los servicios ecosistemicos». Tenemos tres lineas de trabajo orientados al ecoturismo, la conservación de recursos hidrobiologicos (sobre todo de la franja costera) y la educación marina, agregó.
Citó que un proyecto primordial es la instalación de arrecifes artificiales, orientado a estructuras productivas. Se trata de refugios que imitan los arrecifes naturales que generan hábitats en el medio marino para el desarrollo de especies hidrobiologicas. Ante una biodiversidad marina disminuida, se propone esta herramienta para contrarrestar ese efecto, garantizando la generación de conocimiento sobre la riqueza marina y ser también fuente de riqueza.
Recordó que en el Perú no hay regulación para la instalación de estas estructuras artificiales, mientras que a nivel internacional el marco referencial es el Protocolo de Londres, al que nuestro país no está suscrito. Añadió que España es uno de los países líderes que manejan el tema como política de Estado, además, de Australia, Estados Unidos, México. Citó que en el Perú, es Imarpe la entidad que trabaja un proyecto en las costas de Tacna con apoyo de Corea del Sur.
Precisó que la instalación de arrecifes artificiales persigue fines de producción, sirviendo de refugio y desarrollo de juveniles; así como servir para la atracción de especies colindantes. Remarcó que la instalación de estas estructuras debe darse en zonas propicias que respondan a esos fines. Los diseños de estas estructuras dependen de la especie con la que se va a trabajar, añadió.
Benites resaltó que esta iniciativa busca que los beneficiarios directos sean las organizaciones de pescadores artesanales. Cuando ellos sepan los beneficios que lograrán, esas estructuras serán manejadas por organizaciones sociales de base; la idea es hacerlo en conjunto, precisó.