Durante el 2016, el Perú experimentó una intensa temporada de incendios, acrecentada por las sequías en varias regiones del país. Así lo señala el último boletín del Monitoring of the Andean Amazon Project (MAAP), documento elaborado por el Amazon Conservation Association (ACA) y la Asociación para la Conservación de la Cuenca Amazónica (ACCA).
Esta información fue obtenida gracias a la contabilidad de alertas de fuego producidas el año pasado. Estas alertas son generadas de los datos de un sensor satelital (VIIRS, 375 metros de resolución) que detecta focos de calor (áreas donde la temperatura tiene un comportamiento anómalo, por encima de lo normal).
A pesar de que no existe una investigación integral sobre el origen de los incendios, se presume que la mayoría está asociada a prácticas agrícolas (renovación de áreas agrícolas y regeneración de pastos para ganado) que en algunos casos alcanzaron a afectar ecosistemas naturales.