Regidores del municipio de Leoncio Prado reclaman asesores para poder elaborar proyectos

Rider Cárdenas, regidor del municipio provincial de Leoncio Prado, lamentó que en estos dos años de gestión los regidores no hayan podido hacer una serie de pedidos al alcalde durante las sesiones del consejo debido a que ellos no tienen la capacidad de hacer proyectos y un profesional les cobra entre 4 y 5 mil nuevos soles para elaborar cada proyecto.


 


«Nosotros como regidores no podemos en las sesiones o en conversaciones con el mismo alcalde hacer una serie de pedidos o presentar proyectos. Todas estas cosas cuestan y nosotros, muchas veces para presentar un proyecto de envergadura, no podemos hacer un gasto por ejemplo de 4 mil ó 5 mil soles que justamente nos van a cobrar los profesionales», manifestó en diálogo con INFOREGIÓN.


 


El funcionario explicó que los regidores necesitan que alguien los asesore para presentar un buen proyecto sostenible a nivel de Consejo. «Nos imposibilita a nosotros como regidores presentar mensualmente o semanalmente un proyecto porque no contamos justamente con esos recursos», enfatizó.


 


Por otro lado, indicó que el municipio cuenta con funcionarios que hacen este trabajo de asesoría en elaboración de proyectos, pero ellos tienen su responsabilidad dentro de sus respectivas áreas. «Nosotros como regidores debemos presentar nuestros propios proyectos con nuestros propios gastos», remarcó.


 


Así, indicó que esos profesionales apoyan los proyectos que ejecuta el municipio, por lo que muchas veces no tienen tiempo para asesorarlos en la elaboración de sus propios proyectos.


 


Finalmente, indicó que el problema de la deforestación en laderas y cerros aledaños de la ciudad de Tingo María no es de ahora y que año tras año se ha ido agravando por irresponsabilidad de la misma población.


 


Resaltó también la existencia de programas, como el de la Universidad Nacional Agraria de la Selva, que están abocados en reforestar las partes donde ya no hay árboles, pero lamentó que a veces los programas no cuentan con la parte logística para seguir trabajando, por lo que muchas instituciones públicas y privadas dejan de reforestar.