“La Red de Comercio Justo y Consumo Ético tiene más integrantes y ha fortalecido sus capacidades en sus primeros cinco años de existencia, además ha generado más tiendas y ferias en distintos puntos del país”, afirmó su flamante presidente Raúl del Águila.
El también miembro de la Junta Nacional del Café, sostuvo que la Red de Comercio Justo desarrolla un trabajo orientado a incluir sectores marginados dentro de la economía.
“No sólo es una cuestión comercial, sino que también se trata de que los productores accedan al mercado, a la tecnología y al financiamiento. Nos preocupamos porque estas organizaciones históricamente postergadas puedan insertarse a la economía del país”, señaló.
Reclama apoyo del Estado a cafetaleros
De otro lado, el representante de la Junta Nacional del Café reclamó un mayor apoyo del Estado a los productores cafetaleros que no se encuentran en los valles cocaleros.
“Sabemos que es importante la ayuda gubernamental a los agricultores que están dejando los cultivos ilícitos de hoja de coca y se deciden por el café, pero los demás cafetaleros también necesitamos el apoyo estatal”, expresó.
Además, manifestó que en los últimos quince años la producción del café ha crecido y dijo que, felizmente, se ha fortalecido el mercado nacional.
“El año pasado alcanzamos un récord en las exportaciones cafetaleras, pero en el 2009 se ha presentado una disminución por cuestiones climatológicas”, anotó.
Contra la inequidad del comercio
Raúl del Águila brindó estas declaraciones tras la juramentación del primer consejo directivo de la Red de Comercio Justo y Consumo Ético, la cual se realizó en la Casa Kantu y contó con la participación de todos los miembros de esta organización, además del congresista nacionalista José Urquizo.
El comercio justo surgió hace casi 50 años para contrarrestar las relaciones de inequidad y asimetría en el comercio internacional, promoviendo el reconocimiento al trabajo de los pequeños productores de los países del Sur (América Latina, África y Asia) a través del pago de un «precio justo» por sus productos, sensibilizando para ello a los consumidores de los países del Norte (Europa, EEUU, Canadá y Japón) mediante el conocimiento de dicha realidad y el apoyo solidario.
Para ello, las organizaciones promotoras del comercio justo, abrieron miles de tiendas solidarias y generaron sistemas de certificación y redes de intermediación social.
El Grupo de Iniciativa de Comercio Justo y del Consumo Ético organizó en octubre del 2004 el Primer Foro Nacional de Comercio Justo y de Consumo Ético. Después de esta actividad se creó la Red Peruana de Comercio Justo y Consumo Ético.
El comercio justo es un proceso de intercambio comercial orientado al reconocimiento y valoración del trabajo y a las expectativas de los productores y consumidores, permitiendo una mejora sustancial de la calidad de vida y haciendo viable la vigencia de los derechos humanos y el respeto al medio ambiente, dentro de una perspectiva de desarrollo humano, solidario y sustentable.
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